El reloj corre y los equipos europeos tienen pocas horas para terminar de delinear sus planteles. El mercado de pases en el Viejo Continente cerrará mañana y el Barcelona pretende sumar un mediocampista ofensivo para tener alternativas en ese sector. Uno de los nombres que está en carpeta es Ángel Di María, quien está decidido a armar las valijas.
Como las negociaciones con el Liverpool por el brasileño Philippe Coutinho parece que no llegarán a buen puerto, en el Barça ven con buenos ojos la llegada del argentino, que hasta le habría comunicado a Unai Emery (entrenador del Paris Saint Germain) su deseo de marcharse.
Así lo informaron en el medio Cadena Ser de España, mientras el ex Real Madrid se entrena con la Selección de cara al duelo de mañana frente a Uruguay por las Eliminatorias sudamericanas. La idea del Fideo es compartir club con su coterráneo Lionel Messi, al que conoce desde hace muchos años del combinado nacional.
Cabe mencionar que los catalanes llegaron a ofrecer hasta 35 millones de euros por la ficha del rosarino de 29 años, pero Nasser Al Khelaifi, presidente del PSG, descartó esa propuesta. El hombre clave en las tratativas es el representante de Di María, el portugués Jorge Mendes, que mantiene una estrecha relación con Antero Henrique, secretario técnico de los parisinos.
Con Ousmane Dembélé ya cerrado, la entidad culé necesita un futbolista más para retirarse del mercado. También suenan Paulo Dybala y los franceses Antoine Griezmann y Thomas Lemar, aunque Di María espera novedades por su transferencia desde el búnker argentino.
LEA MÁS:
El meme de la conversación entre Messi e Icardi que se hizo viral
Jorge Sampaoli mantuvo el tridente ofensivo, pero cambió el mediocampo y la defensa