Axel Geller tuvo una montaña rusa de emociones ayer en Wimbledon. El junior perdió la final del singles en el All England, pero rápidamente tuvo revancha y se quedó con el título en el dobles.
Pese al logro, Geller tiene otro dilema. El joven ingresó a la Universidad de Stanford luego de realizar exigentes exámenes y sabe que será imposible desarrollar su carrera como tenista profesional y a su vez concurrir a la prestigiosa facultad de California.
"A no ser que gane Wimbledon, me voy a ir a estudiar Economía a la Universidad de Stanford. En mi familia siempre quisieron que le diera prioridad al estudio y lo tengo asumido", había dicho Geller antes de comenzar el certamen.
Tras la final perdida en el singles y la obtención del título en el dobles, Axel mantiene sus convicciones: "¿Si algo me cambia para mi futuro esta semana en Wimbledon? Yo creo que no en el término de que sigo con ganas de ir, por la oportunidad de poder pasar un largo tiempo allí. Me veo yendo a la universidad y tratando de hacer algo en conjunto con mis entrenadores de IMG que me están ayudando ahora. Llegan un montón de propuestas y voy a analizar todo".
De cualquier forma la promesa del tenis argentino no descarta su futuro como profesional. "Llegan un montón de propuestas y voy a analizar todo. Incluso, el entrenador de Stanford es muy honesto y me dijo que cuando me vea que estoy listo para dar el salto, me dirá. También me comentó que a menos que esté ganando challengers o Grand Slam juniors, el mejor camino es la universidad", le dijo Geller a La Nación tras la intensa jornada de ayer.
La carrera de Axel ya ha tenido otros hitos. El último es reciente: el pasado 7 de julio se consagró campeón de un torneo en Roehampton que le valió un reconocimiento de la Asociación Argentina de Tenis. El argentino, que pertenece a la prometedora camada 1999 junto a nombres como Bautista Otegui, Román Burruchaga (hijo del ex futbolista y actual DT argentino Jorge Burruchaga), Tomás Etcheverry y Camilo Ugo Carabelli, entre otros, protagoniza la esperada renovación en el tenis nacional que debe forjarse para continuar con la leyenda.