"Son los colores que llevo en el alma pero claro, con la camiseta no podía (se ríe), entonces se me ocurrió mandar a hacer un traje de neoprene azul y rojo, con el escudo y el nombre del club. Por suerte mi principal sponsor me lo permitió y cumplí el deseo. Está lindo, ¿no?". Santiago Muñiz tiene el entusiasmo y la sonrisa de niño con juguete nuevo cuando muestra el uniforme que se hizo con los el emblema de San Lorenzo.
Lo recibió hace un mes pero el surfista no pudo estrenarlo porque tuvo una lesión en la rodilla izquierda que lo alejó del agua en los últimos 50 días y de las competencias desde hace casi tres meses. Ahora, luego de una rehabilitación de casi un mes en su Mar del Plata natal, pudo meterse con la tabla y probar su traje, justo antes de viajar a Sudáfrica, donde competirá desde la próxima semana en el Ballito Pro, un torneo de elite (entrega 10.000 puntos), importante en su sueño de ascender al Championship Tour (compiten los 32 mejores del planeta).
"Es un orgullo llevar los colores del Ciclón y sobre todo ser la bandera del club en el circuito mundial de surf. Lo hago con toda mi pasión, dedicación y profesionalismo", explica el marplatense de 24 años que hace pocos meses cumplió otro sueño: compartir un entrenamiento con los jugadores del Cuervo. "Estoy muy agradecido a San Lorenzo, es cumplir el sueño de pibe. Toda mi familia es hincha. Mi abuelo fue el primero que me regaló una camiseta de chico y me llevó a la cancha. Ahora, más que nada, lo sigo como puedo desde cada ciudad a la que viajo y estoy muy feliz por el presente del club", comenta.
Muñiz, que también corre con el escudo en la tabla, agradeció de paso a los hinchas del Azulgrana. "Por las redes sociales siento mucho el aliento, el apoyo. De los cuervos y de todos los argentinos", comenta quien además es fanático de Lionel Messi (una de sus tablas está ploteada con la imagen del 10).
Muñiz promete competir en Ballito con ese traje si la temperatura del agua se lo permite. "Ojalá. Es muy finito, pero largo, veremos cómo están las condiciones", informa quien viene de perderse con tres competencias valiosas y cayó hasta el puesto número 46 del ranking QS (Qualyfing Series).
"Estuve decimonoveno luego de salir quinto en Barbados, pero tuve que parar porque estaba compitiendo con mucho dolor", explica. Santi necesita terminar el 2017 entre los 12 ó 14 mejores de ese ranking para cumplir su ilusión de ser el primer argentino en llegar al CT, la NBA del surf. "Por suerte en estas primeras metidas me sentí bien, sin dolor, ahora necesito ir agarrando ritmo y confianza nuevamente. Pero tampoco tengo mucho tiempo porque se vienen torneos importantes en los que debo sumar puntos. Aún no está nada definido, tengo tiempo para volver a los puestos de punta", dice. Por lo pronto, ya tiene traje, el que soñaba, el que quería, uno bien cuervo.
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