En junio del 2015, el fútbol argentino se vio sacudido por la noticia del doping positivo que envolvió al prominente delantero de Racing Brian Fernández. El joven no pudo sobrepasar dos controles que le realizaron tanto por el torneo local como en la Copa Libertadores y fue suspendido por un año y medio.
Luego de más de seis meses en rehabilitación en una reconocida clínica de Tijuana (México) especializada en el combate de las adicciones y con la idea de alejarlo de las malas influencias, Fernández se reincorporó a los entrenamientos pensando en que podrá estar a disposición del entrenador a partir de enero próximo.
"Pasé por un momento malo. Sin embargo, haciendo las cosas bien, haciendo un tratamiento, revirtiendo algunas cosas, hoy en día tengo la cabeza fría", explicó el delantero de 22 años al Sitio Oficial de Racing.
"Tengo a mi familia que me apoya al 100%", afirmó el futbolista que es hermano de Leandro, quien defiende actualmente la camiseta de Independiente.
Fernández jugó 21 encuentros con la casaca de la Academia y marcó cinco goles. "Venía hablando con un amigo en el auto y le dije: '¡Qué lindo volver a sentir esa vibra, esos escalofríos que me daba cada partido!'. Entré a la cancha y besé el césped porque quería sentir todas esas cosas. Esa buena vibra que no estaba perdidas pero estaban en un proceso largo", describió.
Tras hablar con Lisandro López, Luciano Acued, Ezequiel Videla y Gustavo Bou, detalló la conversación que mantuvo con Diego Milito. "Tengo su apoyo. Me mandó mensajes, me felicitó. Está feliz de que esté bien, que es lo más importante me dijo", contó.
LEA MÁS:
"Brian Fernández volvió a entrenar en Racing tras realizar un tratamiento por su adicción"