Durante la dictadura de Francisco Franco, las obras del escritor mexicano Juan Rulfo enfrentaron una estricta censura en España. Títulos como Pedro Páramo y El llano en llamas fueron prohibidos por el régimen franquista debido a su contenido. La censura sobre Pedro Páramo se extendió hasta 1969, una novela considerada inapropiada por las autoridades. Sin embargo, esta prohibición no impidió que los textos de Rulfo circularan clandestinamente.
Que no se autorize [sic]
Por estos días circuló en X (ex Twitter) un documento del informe de 1955, recibiendo muchos reposteos y más comentarios. Lo posteó el usuario Literland (@literlandweb1) subrayando que “no ha pasado tanto tiempo”. “¿Ataca el Dogma? No. ¿A la Moral? Sí. Páginas: 24, 25, 30, 35″, se lee. Y más abajo: “Novela biográfica de un cacique rural mejicano, cuyos episodios muestran su vida de constante violador del derecho y el honor de los a él sometidos”.
Luego, se precisa el motivo en cuestión: “Descripciones crudas de hechos y situaciones inmorales, que a juicio del Lector que suscribe aconsejan que no se autorize [sic] la distribución de tal novela”. “El sistema de censura español no reconocía origen ni géneros literarios”, escribió Eduardo Bautista en el sitio mexicano El Financiero. El caso de Rulfo era particular: el gobierno de México nunca reconoció la dictadura de Franco. Y él era un mexicano politizado.
Breve historia de una primera novela
Pedro Páramo fue su primera novela. Fue inicialmente recibida con críticas negativas, pero su estructura innovadora y su narrativa única lograron posicionarla como una de las precursoras del realismo mágico y del posterior boom latinoamericano. Se desarrolla en el contexto de la Guerra Cristera, un conflicto armado que marcó la historia de México en la primera mitad del siglo XX. La novela entrelaza las historias de Juan Preciado y Pedro Páramo.
Rulfo comenzó a trabajar en esta novela a finales de los años 40. Fue gracias a una beca otorgada por el Centro Mexicano de Escritores que pudo finalizar el manuscrito y publicar adelantos en revistas mexicanas entre 1953 y 1954, bajo títulos preliminares como Una estrella junto a la luna, Los murmullos y Comala. La publicación definitiva en 1955 marcó un antes y un después en la carrera del autor, quien ya había debutado con El Llano en llamas, una colección de cuentos.
La obra se caracteriza por su estructura fragmentada y su uso del realismo mágico, un recurso que combina elementos fantásticos con descripciones realistas. Este enfoque narrativo fue clave para que la novela se convirtiera en un referente del boom latinoamericano, un movimiento literario que surgió en las décadas de 1960 y 1970 y que incluyó a autores como García Márquez, Mario Vargas Llosa y Julio Cortázar.
Pedro Páramo
eBook
$5,99 USD
El contexto político
Este contexto político contribuyó a que las obras del autor jalisciense fueran vistas con sospecha por las autoridades españolas. “Los libros de Rulfo -y de muchos otros autores prohibidos- podían conseguirse en las secciones piratas de las librerías, adonde acudían clientes de confianza en horas previamente pactadas”, cuenta Bautista. La censura hacia las obras de Rulfo también reflejaba el conservadurismo religioso que dominaba en España bajo el franquismo.
El medio detalla que, mientras en España los lectores adquirían las obras de Rulfo de manera furtiva, en México el autor mantenía vínculos con figuras como el cantautor Joan Manuel Serrat, quien había encontrado refugio en el país tras huir de las persecuciones del régimen franquista. Serrat, según ha reconocido públicamente, veía en Rulfo no solo a un amigo sincero, sino también a un símbolo de la hospitalidad mexicana hacia los exiliados.
Impacto y aval
El impacto de Pedro Páramo no se limitó a su contexto inmediato. Escritores de renombre internacional, como Gabriel García Márquez y Jorge Luis Borges, elogiaron la obra. García Márquez afirmó que ninguna lectura lo había conmovido tanto desde que leyó La metamorfosis de Franz Kafka, mientras que Borges la calificó como “una de las mejores novelas de las literaturas de lengua hispánica, y aun de la literatura”.
Pedro Páramo, publicada originalmente en 1955, no fue autorizada para su distribución en el país hasta 1969, mientras que El llano en llamas enfrentó un retraso de ocho años, siendo finalmente aprobada en 1960. Estos obstáculos no impidieron que sus libros siguieran vivos, cultivando lectores secretos. A pesar de las restricciones, la obra de Rulfo logró consolidarse en España, donde hoy es reconocida como una de las más influyentes de la literatura hispana.