Allee Willis, la desconocida mujer que compuso las canciones de toda una generación

En la víspera de la Navidad de 2019, Allee Willis, una de las compositoras más prolíficas y desconocidas de la música contemporánea, falleció en Los Ángeles. Tenía 72 años; paro cardíaco. Un año antes fue incluida en el Salón de la Fama de los Compositores y cinco después de su muerte en el de las Compositoras. ¿Quién esta mujer de quien la mayoría no tiene idea? La respuesta está en The World According to Allee Willis (El mundo según Allee Willis), un documental dirigido por Alexis Manya Spraic y producido por Magnolia Pictures, que se estrenó recientemente en Apple TV.

La película explora la vida y obra de esta artista multifacética, revelando una personalidad vibrante y una creatividad inagotable que trascendió la música. Su legado sigue vivo en las canciones que definieron décadas de la cultura pop. Su catálogo de éxitos —que han vendido más de 60 millones de discos— incluyendo clásicos como “September” y “Boogie Wonderland” de Earth, Wind & Fire, así como el icónico tema de apertura de la serie Friends, “I’ll Be There For You”. Este documental busca corregir la paradoja de que su nombre permanezca fuera del foco público.

Nacida en 1947 en Detroit, en pleno auge de la industria automotriz, creció en un entorno que no comprendía del todo su espíritu irreverente. Hija de un comerciante de chatarra y una maestra de escuela, pasaba horas sentada frente a los estudios de Motown Records, absorbiendo la música que emanaba de sus paredes. Tras estudiar periodismo en la Universidad de Wisconsin, se mudó a Nueva York en 1969, donde trabajó como redactora en Columbia Records y comenzó a construir su red en la industria musical. En 1974, lanzó su único álbum en solitario, Childstar.

Su apariencia andrógina y su estilo poco convencional no fueron bien recibidos por el público ni por los críticos de la época, lo que fue, según el documental, una experiencia devastadora para Willis, quien abandonó su carrera como intérprete y se refugió en la composición. “El mensaje que recibió fue que al mundo le gustaban sus canciones, pero no ella”, explicó Spraic en el estreno del documental en Nueva York el pasado 15 de noviembre. A pesar de este rechazo inicial, encontró su lugar en Los Ángeles, donde su creatividad floreció.

Con las ganancias de “Boogie Wonderland”, adquirió una casa modernista diseñada por el arquitecto William Kesling en las colinas de Los Ángeles, la cual transformó en un museo de objetos kitsch. Este espacio no solo fue su hogar, sino también un centro de reuniones para figuras de Hollywood como Cyndi Lauper, Patti LaBelle y Mark Cuban, quienes la describen como un genio en el documental. “Siempre tuve una carrera musical, una carrera artística, escenografía, cine y video, tecnología. Las fiestas realmente se convirtieron en el único lugar donde podía combinar todo”, dijo Willis.

Sin embargo, detrás de las extravagantes fiestas y su personalidad arrolladora, Willis enfrentaba una lucha interna. Según Spraic, el productor del filme, aunque era consciente de su individualidad y talento, no siempre logró compartir esa esencia con las personas cercanas a ella. Este conflicto, arraigado en su infancia, marcó gran parte de su vida. Su pareja durante 28 años, la productora Prudence Fenton, confesó en el documental que incluso ella desconocía muchos aspectos del pasado de Willis. Ahora, Fenton se dedica a preservar su legado a través de la Willis Wonderland Foundation.

En Wikipedia hay una larga lista de las canciones que compuso para artistas como Aretha Franklin, Pet Shop Boys, Cyndi Lauper, Herbie Hancock, Joe Esposito, Bobby Wonack, Patti LaBelle, Diana Ross, Bonnie Raitt, Al Jarreau y The Pointer Sister, entre tantos otros. También compuso “I’ll Be There for You” de The Rembrandts. La escribió junto a David Crane y Marta Kayuffman, y terminó como tema principal de la serieFriends, que se emitió por la cadena NBC entre 1994 y 2004. También hizo bandas sonoras. Ganó dos premios Grammy.

“A medida que avanza el relato de su biografía, todo cobra sentido. No es que uno entre en su cabeza, sino que uno se da cuenta de que lo que salía de ella definió la cultura pop en la que vivimos. Mucho más cercana a las maneras actuales de la Generación Z que a las de sus coetáneos”, escribe en El País la periodista española Esperanza Balaguer. Su colaboración con Earth, Wind & Fire produjo éxitos, pero también cambió la vida de todos. “Ella dijo que tuvo suerte de conocernos. Nosotros también tuvimos suerte de conocerla a ella”, recordó Verdine White, bajista del grupo.