Quienes leemos nos enfrentamos a pequeños problemas cotidianos. Ahora que se termina el año, nos preguntamos por el tiempo: ¿cuándo terminaremos la pila de libros que nos mira desde la mesita de luz?, ¿cómo concentrarnos en momentos como estos, entre tantos preparativos por las fiestas?, ¿con qué lecturas arrancaremos el año siguiente?
Desde la página oficial del Premio Booker, sus jueces compartieron consejos. Estamos hablando de expertos: cada año leen más de cien libros en aproximadamente siete meses. “Y aunque leer para el premio es una tarea seria, confíen en nosotros cuando les decimos que su lectura diaria no tiene por qué ser tan abrumadora”, se lee en la web.
A continuación, cinco consejos, uno por cada juez. A tomar nota.
1. “Encuentra un compañero de lectura”
Edmund de Waal, presidente del jurado: “Mi consejo, por si sirve de algo, es que busques un compañero de lectura. Hablar de libros es un acto generador: hace que la lectura sea una parte más natural de la vida cotidiana. ‘¿Dónde has llegado con X? ¿Qué sigue?’ Es la estrategia perfecta para cada vez más. Y lleva un libro contigo a todas partes. Es en todos esos pequeños intersticios de tiempo donde puedes leer”.
2. “Mantén un programa de lectura disciplinado”
Sara Collins: “Es útil ceñirse a un programa de lectura disciplinado, tratándolo como un trabajo que hay que hacer en horarios determinados y dándole prioridad en la agenda. Dicho esto, sé que estoy ante un potencial ganador cuando me encuentro con un libro que no puedo soportar soltar. Hubo algunos que terminé apoyando frente a mí mientras lavaba los platos o en la máquina de subir escaleras, o que me hicieron pasarme la parada del metro varias veces. No puedo esperar a poder decirles a todos cuáles eran. Cuando un libro es tan bueno, descubro que nunca es difícil encontrarle un lugar a la lectura; ¡es difícil encontrarle lugar a todo lo demás! Cualquiera que ame la lectura sabrá a qué me refiero”.
3. “Siempre he abogado por una lectura lenta y constante”
Yiyun Li: ‘Siempre he defendido la lectura lenta y constante. No creo que vivamos en una época más ajetreada que la de antes, pero vivimos en una época con muchas más distracciones. Siempre les digo a mis alumnos que, en lugar de conectarse a Internet o mirar el teléfono a primera hora de la mañana, pueden dedicar de 15 a 20 minutos a leer un capítulo de Guerra y paz. Si lo hacen, al final de un semestre de 12 semanas, pueden terminar de leer el libro entero. Para los lectores que quieran incorporar más lectura a sus vidas, ¿quizás sería bueno crear un rincón de lectura en el que no se permitan pantallas de ningún tipo (teléfonos, tabletas y computadoras)?”
4. “Reemplaza el desplazamiento por un libro mientras comes, viajas o te dejan plantado en una cita”
Justine Jordán: “Leer y concentrarse es cada vez más difícil: leí un artículo al respecto. El primer consejo, supongo, es dejar el teléfono en otra habitación y reemplazarlo por un libro cuando se come, se viaja al trabajo o cuando nos dejan plantados en una cita. Hoy en día nadamos en un mar de palabras, así que también recomendaría recurrir a los clásicos: una voz de otro tiempo puede abrirse paso con más claridad entre el vocabulario contemporáneo. Pero, sobre todo, el teléfono”.
5. “Me gusta leer entre las 5 am y las 9 am”
Nitin Sawhney: Considero que, en la medida de lo posible, la mejor manera de leer tantos libros es seguir un horario. Personalmente, me gusta leer entre las 5 y las 9 de la mañana, cuando tengo la mente despejada, antes de empezar el día como es debido. Es importante leer cada libro página por página hasta que te des cuenta de que no puedes dejarlo. Un buen libro te obliga a seguir leyendo hasta el final”.