“Hay una historia que con la que arrancamos en la frontera más austral del país. Empieza con un caballo abandonado en la estepa patagónica, en la provincia de Santa Cruz. Cuando el gendarme se acerca, se da cuenta de que el caballo tiene sobre su lomo más de 2 millones de pesos en cigarrillos contrabandeados, proveniente de Paraguay. Esos cigarrillos llegaron punta de punta a punta del país, literalmente".
Fronteras
eBook
$10 USD
Ahora, en Buenos Aires, Lucía Salinas habla de su investigación. En un evento que reunió a periodistas, académicos y curiosos en Dain Usina Cultural, se presentó la versión en papel de Fronteras, el ebook que ha capturado la atención de miles de lectores y que publicó Leamos, la editorial digital de Infobae.
El trabajo de Salinas se adentra en las complejidades de las fronteras argentinas y ese ebook comenzó por el norte del país. Con más de 11.650 descargas de la versión electrónica, su investigación ha despertado un interés significativo por desentrañar las dinámicas que ocurren en estos espacios liminales. “¿Qué sucede en la frontera? ¿Cómo interactúan la vida cotidiana, la economía y la cultura en estos territorios?”, se preguntó en la noche del martes la periodista Patricia Kolesnicov, coordinadora de Leamos, a cargo de conducir la charla.
Entre quienes escucharon el relato de Salinas estaban el juez de la Cámara de Apelaciones, Mariano Llorens, la jueza federal Sandra Arroyo Salgado y su hija Iara Nisman; Juan Montesano Rebón, Secretario General de la Cámara de Casación, el presidente de la Cámara de Casación, Mariano Borinsky, el juez de la Cámara de Casación, Alejandro Slokar, el juez del Tribunal Oral Federal 4, Néstor Costabel, el juez del Tribunal Oral Federal 2 y presidente de la Asociación de Magistrados, Andrés Basso y Matías Patania, vicepresidente de River Plate.
En su investigación, Salinas observó que, aunque las fronteras del norte y del sur comparten ciertas características—como su permeabilidad y la presencia de comunidades que habitan en ambos lados—también presentan diferencias notables. En el norte, el movimiento es constante y visible, mientras que en el sur, la actividad es más sutil y menos perceptible.
Salias contó que en la ciudad de Salvador Mazza, en Salta, algunas casas tienen su puerta en suelo argentino, pero sus patios se extienden hacia Bolivia. Allí, se cobra un “peaje” informal para cruzar de un país a otro. En contraposición, en la provincia de Santa Cruz, los campos fronterizos presentan un fenómeno similar, donde propiedades privadas tienen acceso a ambos lados, convirtiéndose en espacios de tránsito para actividades ilícitas.
La presentación del libro también contó con la participación de Claudio Savoia y Pablo Ordóñez, quienes discutieron las implicaciones de estos hallazgos y la relevancia de abordar el tema de las fronteras desde diversas perspectivas. Fronteras no solo se presenta como un análisis de la realidad argentina, sino también como una invitación a reflexionar sobre cómo percibimos y entendemos estos límites que nos separan y, a la vez, nos conectan.
Ordóñez, defensor público oficial federal, destacó que la investigación ofrece valiosos análisis desde diversas disciplinas, incluyendo el contrabando y el narcotráfico. Señaló que estas actividades ilegales “transcurren bajo una cultura que es absolutamente diferente” y difícil de comprender desde otras perspectivas del país. Savoia, por su parte, describió las fronteras del país como un lugar donde “los habitantes solo se tienen a sí mismos” y destacó cómo la infraestructura y los mecanismos judiciales a menudo están menos organizados que las redes criminales.
Un aspecto central de la investigación es el fenómeno transnacional del contrabando y otras actividades ilegales que ocurren en las fronteras, las cuales son aprovechadas por organizaciones criminales. Salinas afirmó que “observaron que las organizaciones aprovechan las rutas armadas” por estos territorios y que cambian sus métodos según lo que sea más rentable económicamente. Incluso el caso del caballo con “más de 2 millones de pesos [alrededor de 57.000 dólares] en cigarrillos de contrabando” simboliza la capacidad de adaptación y la sofisticación de estas redes delictivas.
¿Cómo? “Los cigarrillos, que estaban en la estepa patagónica, eran de origen paraguayo", contó Salinas. “Y cuando consultamos cómo llegóesa mercadería hasta ese lugar, lo que lograron descubrir es que tienen las rutas armadas de tal manera que van cambiando de vehículos, que son vehículos con estructuras especiales para no ser detectados. Habían secuestrado camiones repletos de cubiertas que venían del norte del país también, y otros que ingresaban desde Chile"
El documental que acompaña al libro, según Ordóñez, resume visualmente las investigaciones de Salinas, proporcionando al público una comprensión más clara de las condiciones y realidades de las personas que viven en estas áreas. A través de estas representaciones visuales y escritas, la obra provoca un debate sobre cómo el Estado argentino ha empujado a muchas personas a vivir al margen de la ley debido a la falta de oportunidades económicas genuinas en estas regiones.
La complejidad legal de las fronteras también fue discutida, con la mención de investigaciones judiciales conjuntas entre Chile y Argentina, donde se detectaron actividades ilegales en “siete campos fronterizos”. Salinas aclara la dificultad para la administración de la justicia debido a las diferencias sistémicas entre los países, resaltando que mientras en Chile se avanzó rápidamente con el proceso, en Argentina el sistema tradicional ralentiza las acciones judiciales.
El evento culminó en un espacio abierto a preguntas, donde se siguieron explorando temas como el tráfico humano y el papel de la frontera como una realidad viva que desafía las normas establecidas. Salinas destacó que “las fronteras no son solo líneas en un mapa; son espacios cargados de historias, desafíos y oportunidades”, lo que sugiere una complejidad que demanda soluciones integrales desde el Estado.
Fronteras se erige no solo como un análisis profundo de las realidades argentinas, sino también como un punto de partida para reflexionar globalmente sobre las fronteras. La invitación de Salinas es a dejar de ver estos márgenes como simples divisorias y comenzar a entenderlas como espacios de significativa interacción y cambio.
Al final llegaron las preguntas del público: “No dijiste si acá en la Argentina el único detenido fue el caballo"... quiso saber uno de los asistentes. Respondió la periodista:
-Claro. Pobre caballo. Todavía está en el puesto de Gendarmería,
[Fotos: Matías Arbotto]