El Encuentro Nacional de Escritura en la Cárcel (ENEC), que se celebra anualmente, se ha convertido en un espacio crucial para la discusión sobre la escritura y su relación con las políticas y lenguajes en contextos de encarcelamiento. Este evento, que tendrá lugar el 18 de octubre de 2024, es organizado por el Programa de Extensión en Cárceles (PEC), el Departamento de Letras y el Centro Cultural Paco Urondo de la Universidad de Buenos Aires, en colaboración con la asociación civil Dar Margen.
Desde su inicio en 2014, el ENEC ha buscado fomentar el intercambio de experiencias de lectura y escritura, así como difundir la producción literaria y artística que surge en las cárceles. Además, el evento pretende mostrar diversas formas de intervención educativa y cultural en estos contextos. Las primeras ediciones se llevaron a cabo en la Biblioteca Nacional Mariano Moreno y en el Museo del Libro y de la Lengua, pero desde la tercera edición, el Centro Cultural Universitario Paco Urondo ha sido su sede permanente.
Juan Pablo Parchuc, director del Programa de Extensión en Cárceles (PEC) de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA y uno de los organizadores del ENEC, explica que este espacio nació en 2014 como una iniciativa conjunta entre el PEC y el Departamento de Letras de la misma facultad. Este año, se sumó a la organización Dar Margen, una asociación civil con 20 años de experiencia en contextos de encierro. Los encuentros comenzaron tras una conversación con la Biblioteca Nacional, donde se identificó la necesidad de visibilizar las prácticas de lectura, escritura y publicación que estaban surgiendo en todo el país. Con el tiempo, el evento se trasladó al Centro Cultural Universitario Paco Urondo, y se concibió como un espacio de difusión, encuentro y articulación para docentes, investigadores y activistas que trabajan en y sobre el sistema penitenciario en Argentina y América Latina.
La programación del XI ENEC incluye una serie de actividades que abarcan desde paneles temáticos hasta exposiciones de publicaciones y material audiovisual producido en las cárceles. Uno de los paneles destacados es “Bajar es lo peor”, que se centrará en el debate sobre los proyectos de ley de responsabilidad penal juvenil y la reducción de la edad de punibilidad. Este panel contará con la participación de figuras como Eugenio Zaffaroni, ex juez de la Corte Suprema, y Sabrina Selva, diputada nacional, entre otros.
Otra actividad relevante es “Vamos las bandas”, que reunirá a grupos de lectura y escritura colectiva, como el colectivo YoNoFui y proyectos de estudiantes liberados de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP). También se presentarán lecturas de poesía y narrativas de programas educativos en cárceles de países como Brasil y Uruguay.
El evento también ofrecerá un espacio para discutir sobre proyectos de edición independientes, comerciales y estatales en el panel “Editar la cárcel”. Participarán editoriales como FUGA Ediciones y Ediciones Bonaerenses, que han trabajado en la publicación de obras creadas en contextos de encierro.
Además, el ENEC contará con una feria de productos elaborados por cooperativas y proyectos sociales de familiares de personas detenidas y liberadas, lo que refleja su compromiso con la inclusión social y la reintegración. Todas las actividades del encuentro serán transmitidas en vivo a través del canal de YouTube del Centro Cultural Paco Urondo, permitiendo así un acceso más amplio a las discusiones y presentaciones que se llevarán a cabo.
Parchuc resalta la importancia de mantener estos encuentros en el contexto actual. A lo largo de diez años, el interés del público nunca ha disminuido, y constantemente surgen nuevos talleres de escritura y proyectos pedagógicos en las cárceles. Es fundamental ofrecer un espacio donde estas iniciativas puedan ser compartidas y donde los participantes se conecten para potenciar sus proyectos. Los encuentros no solo incluyen paneles sobre temas actuales, sino también lecturas, presentaciones de libros, exposiciones de material audiovisual producido en la cárcel, talleres de arte y música en vivo, así como una feria de productos elaborados por cooperativas gestionadas por familiares de personas detenidas.
En un momento en que el nuevo gobierno promueve políticas punitivas que agravan la violencia y violan los derechos humanos, y enfrenta el desfinanciamiento de las universidades y la ciencia, sostener espacios como este se vuelve aún más crucial. Aquí se escuchan historias de vida auténticas, donde personas que a menudo sacrifican su bienestar para imprimir un libro creen firmemente en el poder transformador de la literatura.