El Premio Nobel de Literatura ha honrado predominantemente a escritores occidentales desde que se entregó por primera vez en 1901, pero la Academia Sueca podría centrar su atención más lejos este año, dicen los expertos.
Sin una lista oficial de candidatos, la especulación es desenfrenada sobre quién elegirá el comité del Nobel, cuya decisión se revelará el jueves 10 de octubre a la 11 de la mañana GMT (8 de la mañana hora de Argentina, 5 de la mañana hora de México). Muchos creen que la autora china Can Xue, favorita en varios sitios de apuestas, ganará, con el novelista australiano Gerald Murnane también como candidato.
A menudo comparada con Franz Kafka, el estilo experimental de Can transforma lo mundano en lo surrealista. La academia es conocida por su inclinación a llevar autores menos conocidos a un público más amplio. “Creo que se han esforzado mucho en encontrar algún escritor que sorprenda a los comentaristas culturales”, dijo Bjorn Wiman, editor de cultura en el periódico de referencia de Suecia, Dagens Nyheter.
Ese fue el caso en 2021, cuando se eligió al autor británico nacido en Zanzíbar Abdulrazak Gurnah por su trabajo sobre el exilio, el colonialismo y el racismo; y en 2016, cuando ganó el icono del folk rock estadounidense Bob Dylan.
Wiman dijo que el premio podría ir tan fácilmente a un escritor mexicano o argentino, como a un autor africano. “Creo que será una mujer de una zona lingüística fuera de Europa”, dijo.
Sin embargo, su elección personal sería el autor británico nacido en India Salman Rushdie, símbolo de la libertad de expresión tras recibir amenazas de muerte por su novela de 1988 Los versos satánicos, declarada blasfema por el líder supremo de Irán, y víctima de un apuñalamiento en 2022 en el estado de Nueva York que le hizo perder el ojo derecho.
“Pero entonces serán acusados de homenajear a otro hombre de mediana edad”, dijo Wiman, en referencia a que el año pasado, el premio fue para el dramaturgo noruego de mediana edad Jon Fosse.
Premio eurocéntrico y masculino
Desde su creación, el Premio Nobel de Literatura ha sido un asunto eurocéntrico y masculino. De 120 laureados, solo 17 han sido mujeres, y ocho de ellas en los últimos 20 años.
Y mientras que 30 autores de lengua inglesa han ganado y 16 de lengua francesa, solo un escritor árabe ha ganado: el egipcio Naguib Mahfouz en 1988. En el caso de China, su “literatura es muy vasta”, algo que no se refleja en la historia del Nobel, dijo Carin Franzen, profesora de literatura en la Universidad de Estocolmo. El último autor chino en ganar fue Mo Yan en 2012.
Una explicación para esta falta de representación podría ser la falta de amplitud lingüística de los jueces, dijo Víctor Malm, editor cultural en el diario Expressen. Predijo que este año ganaría la estadounidense-antiguana Jamaica Kincaid. “Me cuesta creer que de repente anuncien a un autor hindú. Nadie en la Academia habla hindi, ¿cómo podrían tener alguna credibilidad en el tema?”, dijo, señalando que tendrían que depender de obras traducidas.
La academia siempre ha consultado a expertos en su proceso de selección y, prometiendo una mejor representación, amplió sus esfuerzos en 2021 para incluir expertos en lenguas. “No es obviamente lo mismo que poder leer en el idioma original”, dijo Lina Kalmteg, crítica literaria en la radio pública sueca SR. Según ella, era raro que los escritores bajo consideración para el Nobel “no estuvieran traducidos al sueco en absoluto”.
Perspectiva no europea
Con una predominancia tan marcada de laureados occidentales, ¿cómo se puede considerar al Nobel uno de los premios literarios más prestigiosos del mundo? Históricamente, la cultura occidental fue considerada superior, señaló Rasmus Landstrom, crítico literario en el diario Aftonbladet.
La academia “lo dijo abiertamente” en el pasado, afirmó, señalando que las deliberaciones del jurado, selladas durante 50 años, revelan que ha luchado con ese prejuicio durante décadas.
Después de un escándalo #MeToo en 2018 que dejó a la Academia en ruinas, la institución prometió ampliar el premio, tanto geográficamente como lingüísticamente. “Por lo tanto, sería interesante para ellos abrirse a una perspectiva no europea”, dijo Franzen. Su favorita es la poeta canadiense Anne Carson.
El editor cultural del diario Goteborgs-Posten, Johan Hilton, está apostando mientras tanto por un escritor de Europa Central o del Este. “Francia, Estados Unidos, Gran Bretaña, han ganado varias veces en los últimos años”, dijo Hilton. Pero no hay manera de que un ruso pueda ganar este año, ni siquiera un crítico del Kremlin, señaló, a pesar de que la academia insiste en que no considera nacionalidades. “Es políticamente imposible. Me sorprendería mucho”, dijo, añadiendo que eso dañaría la credibilidad del premio.
Otros nombres que circulan en los círculos literarios de Estocolmo incluyen al húngaro Laszlo Krasznahorkai, al rumano Mircea Cartarescu, al keniano Ngugi wa Thiong’o y al japonés Haruki Murakami.
[Fotos: Handout/Chen Xiaozhen/AFP; Alejandro Martínez Vélez/Europa Press; Claudio Bresciani/TT News Agency/via Reuters; Casa Real España vía Europa Press]