El Islam a través de los siglos: política, religión y poder en el mundo musulmán

En “Una historia del mundo musulmán. Desde sus orígenes hasta los albores de la modernidad”, Michael Cook bucea cómo se constituyó el Islam desde sus orígenes y cómo llega a nuestros días

Guardar
La historia del Islam, en
La historia del Islam, en un libro exhaustivo

En su libro A History of the Muslim World (Una historia del mundo musulmán) Michael Cook presenta un análisis profundo de la historia del mundo musulmán desde sus orígenes hasta la modernidad. El texto examina cómo el Islam emergió y se expandió, así como los desafíos que enfrentaron las sociedades musulmanas al interactuar con Occidente, particularmente a partir del siglo XIX.

A lo largo de la obra, Cook presenta ideas clave que permiten entender los procesos históricos, políticos y sociales que definieron el mundo musulmán.

Comienzos en Arabia

La narrativa comienza con el surgimiento del Islam en la península arábiga y cómo la religión de Mahoma se expandió rápidamente más allá de las fronteras de Arabia. Cook subraya que el mundo islámico se formó de manera radical debido a la nueva religión, que no solo transformó las creencias espirituales, sino también las estructuras políticas y sociales de las regiones donde se implantó. A través de sus conquistas, los árabes lograron unificar vastos territorios que iban desde el Medio Oriente hasta España y el norte de África. Este proceso fue fundamental para la creación de lo que más tarde se denominaría el “mundo musulmán”.

Uno de los aspectos clave que Cook desarrolla es la figura de Mahoma y cómo su mensaje transformó no solo las creencias espirituales, sino también las estructuras políticas. Cook describe a Mahoma como un ”renovador abrahámico”, situándolo en una tradición que buscaba restaurar las enseñanzas de los profetas anteriores. Además, enfatiza que Mahoma no solo fue un líder religioso, sino que ”el estado de Mahoma” surgió como una consecuencia directa de su mensaje religioso.

El historiador Michael Cook. (Wikipedia)
El historiador Michael Cook. (Wikipedia)

Una anécdota que ilustra este período es la conocida historia de la muerte del profeta Mahoma y la elección de su sucesor. Se cuenta que, tras su muerte, la comunidad islámica entró en una crisis, ya que no estaba claro quién lideraría a los musulmanes. Abu Bakr, uno de los primeros seguidores de Mahoma, fue finalmente elegido como califa. Según Cook, este evento fue crucial no solo por la continuación del liderazgo, sino porque estableció el precedente de una forma centralizada de gobierno dentro de la comunidad islámica.

El impacto de la expansión

Uno de los aspectos más interesantes del libro es el análisis de Cook sobre cómo el Islam fue capaz de adaptarse a diversas culturas y sociedades a medida que se expandía. A través de sus conquistas y la incorporación de diferentes pueblos, el Islam fue tanto una religión como un sistema político que establecía el control sobre grandes territorios. Sin embargo, no todo fue un proceso homogéneo. Como indica Cook, existieron momentos de tensión y resistencia, tanto interna como externamente, que moldearon las diferentes versiones de la práctica islámica.

Uno de los momentos clave que Cook analiza es la primera guerra civil islámica, también conocida como la fitna, que sacudió al mundo musulmán poco después de la muerte de Mahoma. Según Cook, ”La primera guerra civil” fue un conflicto que marcó el inicio de profundas divisiones dentro de la comunidad musulmana, y fue a partir de este evento que comenzaron a surgir las dinastías islámicas.

La mezquita Azul de Estambul
La mezquita Azul de Estambul (Turquía).

El autor también destaca la creación de nuevas culturas musulmanas en lugares tan diversos como Persia, el norte de África, y el subcontinente indio. Cada una de estas regiones adoptó la religión islámica a su manera, dando lugar a variaciones en la práctica y la interpretación. Este fenómeno de diversidad dentro de la unidad fue clave para la expansión y la pervivencia del Islam a lo largo de los siglos.

Interacción con Occidente

Uno de los capítulos más fascinantes de la obra de Cook se centra en la relación entre el mundo musulmán y Occidente, especialmente a partir del siglo XIX. En este punto, el mundo musulmán se encontraba en una situación de desventaja con respecto a las potencias occidentales, que habían experimentado la revolución industrial y avances tecnológicos significativos. La interacción con Occidente trajo tanto beneficios como desafíos. Mientras que los líderes musulmanes intentaron modernizar sus sociedades imitando ciertos aspectos de la civilización occidental, como la tecnología y la organización militar, también surgió una resistencia cultural, ya que muchos temían que estos cambios erosionarían los valores islámicos tradicionales.

Un ejemplo notable de esta interacción es el intercambio intelectual entre musulmanes y cristianos durante el Renacimiento europeo. Cook relata cómo, a pesar de las tensiones entre el Islam y el cristianismo, hubo un considerable flujo de conocimientos.

Mujeres musulmanas leen el Corán
Mujeres musulmanas leen el Corán mientras esperan a la hora de romper el ayuno en el primer día del Ramadán en la mezquita Istiqlal en Yakarta, Indonesia, el martes 12 de marzo de 2024. (AP Foto/Achmad Ibrahim)

Cook explica cómo, a partir del siglo XIX, los gobiernos musulmanes comenzaron a enfrentarse al desafío de adaptarse a los cambios globales. Aunque no usa el término “terrorismo”, Cook habla de la “resistencia” que algunas comunidades musulmanas ofrecieron frente a las influencias externas.

Orígenes del islamismo radical

Cook explora cómo el islamismo radical se originó en respuesta a las crisis que afectaron a las sociedades musulmanas, especialmente en los siglos XIX y XX, cuando estas sociedades comenzaron a entrar en contacto más directo con las potencias coloniales occidentales. A medida que el poder militar y político de Europa crecía, el mundo musulmán, que había sido una civilización próspera durante siglos, comenzó a perder influencia y prestigio. Esta dinámica creó un sentimiento de crisis e identidad entre ciertos sectores de la población musulmana.

book img

GuíaBurros: Islam

Por Andrés Guijarro

eBook

$3,99 USD

Comprar

La obra de Cook señala que uno de los factores clave que alimentó la radicalización fue la percepción de que el declive del mundo islámico era consecuencia de su alejamiento de los principios fundamentales del Islam. Esta idea fue promovida por pensadores islamistas, como el egipcio Sayyid Qutb (1906-1966), quien sostenía que la única solución para revivir el esplendor musulmán era un retorno estricto a la sharía (ley islámica). Qutb y otros teóricos islamistas creían que el mundo occidental había corrompido a las sociedades musulmanas y que la única forma de salvarlas era a través de la purificación de la fe y la política. Según Cook, esta línea de pensamiento fue central para el desarrollo del islamismo radical que, con el tiempo, justificaría la violencia para alcanzar estos objetivos.

La yihad y la violencia política

El concepto de yihad, que históricamente tenía múltiples significados, incluidos los esfuerzos personales por mejorar moral y espiritualmente, fue reinterpretado por ciertos grupos radicales como una obligación de lucha armada contra los “infieles” y aquellos que, dentro del mundo musulmán, no seguían el camino del Islam de manera estricta.

Cook analiza cómo esta visión de la yihad fue utilizada por organizaciones como al-Qaeda para legitimar actos terroristas, no solo contra objetivos occidentales, sino también contra gobiernos musulmanes que consideraban apóstatas por su alianza con Occidente o por no aplicar la sharía en sus legislaciones.

Las sangrientas ejecuciones del Estado
Las sangrientas ejecuciones del Estado Islámico.

Una de las citas de un líder de al-Qaeda que Cook menciona ilustra esta visión radical: “El que cree en el concepto de democracia... es un apóstata”. Esta afirmación encapsula el rechazo extremo que los islamistas radicales sienten hacia las ideas políticas occidentales, como la democracia y el liberalismo, que consideran incompatibles con el Islam. Para estos grupos, cualquier gobierno musulmán que adopte estos sistemas es visto como ilegítimo y merece ser combatido.

El mundo musulmán en la modernidad

Cook cierra su análisis con una reflexión sobre la transformación del mundo musulmán en la modernidad. El impacto de Occidente, a través de la colonización y la globalización, trajo consigo cambios profundos en las sociedades musulmanas. No obstante, a pesar de la influencia externa, Cook subraya que muchas de las características distintivas del mundo islámico han perdurado, incluyendo la importancia de la religión en la vida pública y la cohesión de las comunidades musulmanas alrededor del mundo.

Dubai, tradición y modernidad. (REUTERS/Nabila
Dubai, tradición y modernidad. (REUTERS/Nabila Eltigi)

Un último punto que Cook destaca es la demografía. A lo largo del último siglo, la población musulmana ha crecido de manera exponencial. Esto ha creado nuevas dinámicas, especialmente en países de mayoría musulmana que han tenido que enfrentar desafíos como el urbanismo y la modernización. En palabras del autor, “el mundo musulmán es ahora más numeroso, más diverso y más global de lo que Mahoma podría haber imaginado.

En conclusión

El libro de Cook ofrece una visión detallada de los procesos históricos que han definido la trayectoria del mundo musulmán desde su nacimiento hasta la modernidad. Cook explora cómo el Islam ha sido una fuerza no solo religiosa, sino también política y cultural, adaptándose a diversas sociedades y enfrentando los desafíos impuestos por las influencias externas, especialmente las occidentales.

A lo largo de los siglos, las tensiones entre la modernización y la tradición han sido constantes, lo que sigue influyendo en la evolución del mundo musulmán actual.

Guardar