En Otro posible es posible Candelaria Traverso presenta sus nuevas obras y parte del imaginario que trabaja. Nació en Córdoba en 1991 y vivió su niñez en la provincia de Jujuy. Luego regresó a su ciudad natal para continuar sus estudios en la Universidad Nacional de Córdoba, en donde se graduó en Artes Visuales. Actualmente vive y trabaja en Catamarca, al pie de la Cordillera de los Andes. Lo destellos de ese lugar se ven en su nueva exposición, inaugurada el 14 de agosto pasado en Herlitzka & Co.: Libertad 1630, C.A.B.A.
“El lugar te pone en otra órbita, en un estado de contemplación”, dice la artista sobre este sitio en el que generó nuevos vínculos con los pobladores del lugar y las mujeres del mercado. Influenciada por las tradiciones de la región y, al tiempo, protagonista de la contemporaneidad, Traverso presenta una serie de objetos, que llevan marcas ocultas de época y de formas de producción y consumo global. Hay que descubrirlos en sus singulares mantas–mapas, en las sutiles improntas de maíces sobre cerámica, en sus vasijas elaboradas con tierra del lugar, en una instalación con prendas hechas con ropa usada y en un fuerte hecho con atados de chalas.
En el texto de sala, Catalina Lozano sostiene que “su práctica refleja un esfuerzo y una intención de situarse en este lugar [Maimará, Quebrada de Humahuaca, Jujuy] donde convergen muchos tiempos que responden a procesos de corta y larga duración y a espacios físicos, espirituales y virtuales. Los imaginarios andinos atraviesan su práctica, así como la circulación de bienes locales y globales atraviesa los Andes”.
“La articulación de estos dos flujos, uno ligado al sentipensamiento, otro a los márgenes del capitalismo en donde el intercambio y el reciclaje subvierten a menudo sus lógicas, proporciona una base importante del trabajo de Candelaria”, continúa y agrega que “está la cercanía física y afectiva a los mercados de tradición ancestral que hoy reciben también ropa de segunda mano, viajando en fardos por todo el mundo y penetrando y transformando las referencias culturales y las imágenes del mundo que se producen en todas partes”.
A partir del reciclaje y la labor de retazos, remiendan, bordan y tejen, retomando prendas que remiten a las primeras mantas prehistóricas y vestimentas usadas en los Andes. Como el poncho, la ruana o el uncu, estas estructuras que son al tiempo superficies blandas también se convierten en toldos, carpas o bolsas contenedoras, elementos primigenios para la recolección y supervivencia de los pueblos.
“Candelaria recurre a la noción de chaka-runa o ‘persona-puente’, aquellas que pueden vehicular una interacción entre las diferentes dimensiones que componen la realidad. Esta exposición toma chaka-runa como una herramienta metodológica para trabajar entre diferentes espacio-temporalidades”, agrega Lozano.
* “Otro posible es posible” de Candelaria Traverso se expone en Herlitzka & Co. (Libertad 1630, C.A.B.A.)