El pianista cubano Chucho Valdés, que inició su gira europea en Canarias (Atlántico) con un repaso de la obra del grupo Irakere, la banda que cambió el jazz latino, avisa que, a sus 82 años, “no se cansa”, sino que tiene más deseo de hacer cosas nuevas.
“El año que viene cumpliré 80 años arriba del piano, porque empecé a los tres. Y en vez de cansarme tengo más deseo, porque el arte te alimenta y es como una espiral sin fin, siempre hay cosas nuevas y en la música ocurre lo mismo”, ha declarado.
Con 14 Grammys a sus espaldas, Valdés ha explicado, en rueda de prensa en el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, las bases de una gira que es un tributo a Irakere, una de sus primeras bandas y que “cambió el curso y fue un nuevo punto de partida y un nuevo camino para la música cubana”.
“Su influencia se mantiene en las nuevas generaciones y ha sido la casa de grandes músicos cubanos como Paquito D’Rivera o Arturo Sandoval. Irakere ha hecho historia y está reconocida como la banda de jazz más influyente en la segunda mitad del siglo XX”, ha dicho Valdés, que ha avanzado que esta vez le acompaña una nueva generación de jóvenes que están “emocionados” de hacer su aportación, como su hijo Julián, en la percusión.
Sobre su próximo proyecto, que se llamará Chucho sinfónico, ha adelantado que tiene escrita la música y está “esperando un lugar y una orquesta”.
Fuente: EFE
[Fotos: EFE/ Miguel Barreto]