Uno de los temas culturales más espinosos del mundo vuelve a estar en el candelero: la disputa por las piezas del Partenón entre Gran Bretaña y Grecia. Las antigüedades, también conocidas como los Mármoles de Elgin, fueron retiradas a principios del siglo XIX por Lord Elgin, embajador británico ante el Imperio Otomano, que gobernaba Grecia en aquella época, y se conservan en el Museo Británico de Londres. Grecia lleva mucho tiempo reclamando su devolución. El museo sostiene que Elgin retiró las esculturas legalmente después de que las autoridades otomanas le concedieran un edicto imperial que se lo permitía.
Sin embargo, Zeynep Boz, directora del comité de lucha contra el contrabando del Ministerio de Cultura turco, declaró en una reunión del Comité Intergubernamental para Fomentar el Retorno de los Bienes Culturales de la UNESCO celebrada en París que no se ha encontrado tal documento. La ministro de Cultura griega Lina Mendoni declaró que esos comentarios refuerzan el argumento de Grecia de que las esculturas fueron sustraídas ilegalmente del templo del Partenón en la Acrópolis y deben ser devueltas.
Como sucesor del Imperio Otomano, “Turquía es el país que tendría el documento archivado relativo a las cosas que se vendieron legalmente en aquella época”, comentó Boz . “Los historiadores han buscado durante años en los archivos otomanos y no han podido encontrar un “firman” que pruebe que la venta fue legal, como se está afirmando”.
Boz añadió que se sintió obligada a intervenir durante la reunión de la UNESCO después de que un participante británico dijera en su discurso que los Mármoles de Elgin fueron comprados legalmente durante la época otomana. “Haber guardado silencio habría equivalido a reconocer la reclamación británica”, afirmó. “Tuve que decir: No tenemos conocimiento de tal documento”. El único documento existente conocido que hace referencia al edicto imperial es una traducción italiana. Sin embargo, Boz dijo que no tiene “ni firma, ni sello, ni tughra (sello oficial del sultán). Nada que lo haga oficial. El documento al que supuestamente se refiere no se encuentra en ninguna parte”.
Aunque los lazos entre Grecia y Turquía son a menudo tensos y los dos países están enfrentados por una amplia serie de cuestiones, entre ellas las reivindicaciones territoriales, ambos reclaman la devolución de objetos culturales sustraídos de sus territorios y actualmente depositados en museos de todo el mundo.
La ministra griega de Cultura, Lina Mendoni, afirmó que los comentarios de Elgin refuerzan el argumento griego de que Elgin sustrajo ilegalmente las esculturas. “Nunca hubo un “firman” otomano que autorizara a Elgin a tratar las esculturas del Partenón con la brutalidad con la que lo hizo”, declaró la funcionaria.
“El representante de Turquía (en la reunión de la UNESCO) confirmó lo que la parte griega lleva años sosteniendo. Que no hubo ‘firman’”. Mendoni dijo que Grecia seguía “abierta al diálogo” y que continuaría sus esfuerzos para la devolución de las esculturas, que tienen un lugar reservado para ellas en el Museo de la Acrópolis de Atenas.
Por su parte, el Museo Británico se remitió a una declaración que hizo en la reunión de la UNESCO en la que reiteraba su deseo de una “asociación del Partenón” para resolver la disputa, y dijo que no tenía nada más que añadir. “El Museo Británico reconoce el fuerte deseo de Grecia de que las esculturas del Partenón que se encuentran en Londres sean devueltas a Atenas”, decía la declaración. “Esta es una cuestión con una historia muy larga, y entendemos y respetamos los fuertes sentimientos que despierta este debate”.
Y añadía que estaba “deseando desarrollar una nueva relación con Grecia -una “asociación Partenón”- y explorar la posibilidad de formas innovadoras de trabajar (con nuestros amigos griegos) con la esperanza de que la comprensión de las Esculturas del Partenón se profundice y siga inspirando a personas de todo el mundo”.
Fuente: AP
[Fotos: Europa Press/Contacto/Li Ying; AP Photo/Kirsty Wigglesworth; Michael Varaklas/Pool via REUTERS; AP Photo/Kirsty Wigglesworth]