Tras visitar España, y antes de continuar viaje hacia México y Colombia, el grupo santafesino Canticuénticos desembarcará en la Ciudad de Buenos Aires por una única función en la Ciudad Cultural Konex –Sarmiento 3131– . La cita es el sábado 16 de marzo a las 19.
Con un repertorio que incluye éxitos como “La cumbia del monstruo” –su hit que superó los ciento cincuenta millones de visitantes en YouTube–, los clásicos “Quiero para mí”, “El mamboretá”, “La rana rosita” y “Hay secretos”, además de otras canciones más nuevas, como “El pulpo cocinero” y “El lorito Teté”, de su álbum más reciente, Para saber que te quiero (2023), prometen una noche inolvidable, con un espectáculo de música y juegos para toda la familia.
El grupo Canticuénticos, recién llegado tras una exitosa gira por España –donde visitó Madrid, Barcelona, Alcalá de Henares y Zaragoza–, ha forjado una impresionante carrera musical dedicada a la infancia y la familia, que incluye ritmos autóctonos latinoamericanos y que contempla en sus letras problemáticas contemporáneas mediante la música y la literatura.
Ruth Hillar, una de las voces femeninas de la banda, que además toca la flauta y el acordeón, conversó con Infobae Cultura acerca de los orígenes, búsquedas y lo que le depara a Canticuénticos. Para ello se remonta al año 2007, cuando todo comenzó como un proyecto de composición de canciones. Al principio fue solo eso, una etapa compositiva en la que generar un repertorio que fuera “un aporte al cancionero de raíz folclórica para nenas y nenes, basado en los ritmos del litoral, para extenderlo un poquito a los ritmos folclóricos de nuestro país”, para “estirarlo” un poco más “todavía a toda la riqueza de la música latinoamericana”.
Eso, subraya, es “la piedra fundacional desde el lado musical”, pero, además, señala que desde la palabra también existe un compromiso de situarse en el presente, para retomar “las cuestiones que atraviesan a nenas, nenes y a los adultos, también”. Se enfocan en contar “este día a día que vamos transitando en nuestra vida a través de las canciones”.
Tras la composición del primer disco, fue que formalmente se armó como grupo musical Canticuénticos, ya con el objetivo de “salir a mostrar estas canciones”. Desde ese momento hasta la fecha, ya llevan más de quince años de carrera –”con seis discos sonando”– y más de mil doscientos espectáculos en el país y el exterior.
Sin embargo, Canticuénticos no se ha limitado, en exclusiva, a la música, ya que en este tiempo han producido tres colecciones de libros, Canticuénticos en papel, Canticuénticos en cartón y Canticuénticos en canciones, que abarcan distintas etapas etarias de las infancias.
Además, continúa Hillar, en su página web, en la que se encuentran los videos de YouTube, la agenda de espectáculos y enlaces a sus redes sociales, dedican una sección completa para la descarga libre de material, que acercan especialmente a su público. “Ahí pueden encontrar tanto las partituras, los cancioneros con los cifrados para tocar, e incluso los karaokes también para cantar. Todo ese material está disponible para usar en la escuela, en el jardín, en los hogares. Y nos encanta cuando nos llegan devoluciones de la gente, que generan esas otras versiones de las canciones que nos gustan tanto”.
Y es desde este lugar que remarca cuál es el objetivo del grupo –”que lo tenemos bien claro”–: “acompañar a las infancias desde el arte, con cariño, con responsabilidad, con mucho compromiso”. Pero además buscan apoyar a los adultos en la crianza, en este vínculo que se va gestando entre las familias, padres y madres, pero también con abuelas y abuelos. Tiene la convicción de que al disponer de un repertorio de canciones, las familias podrán mantener esos lazos firmes. “Porque esas canciones compartidas se convierten en algo importante a la hora de bailar juntos, de cantar juntos. En un viaje en el que se escucha una canción, es un momento que se acompaña también con tal o cual propuesta”.
En todo eso piensan al componer y al armar un espectáculo. Y esta idea abre la puerta para que mencione esa otra pata del proyecto –”que es muy linda y muy fuerte”–, la de mostrar la música en vivo en los conciertos. “Es otra instancia completamente diferente a la de la grabación, y mucho más todavía de la de la composición, que se hace más en soledad”. Ejecutar las canciones en el momento del vivo tiene mucha fuerza, señala Hillar.
“Ese encuentro con el público nos parece algo realmente maravilloso, en el que se construye un momento, una situación, una vivencia entre el grupo y el público, y ese público siempre es diferente. Por eso cada concierto es distinto”.
Canticuénticos considera fundamental poder ofrecer un repertorio que esté arraigado en este momento y en este lugar, como forma también de empoderar a las infancias con algo que sea propio, que se sienta propio. Pero, a la vez, y aquí toman una posición muy clara: “Protegerlas un poco de esa irrupción tan fuerte y tan violenta que hace muchas veces la cultura del entretenimiento; en la que tanto nenas, nenes, adolescentes, adultos se ven como meros consumidores, como parte de un mercado, y así se tratan”. Es por eso que proponen alternativas que van por otro lado, “más por el lado del respeto, del cuidado, del amor. Y bueno, por ahí estamos caminando con los Canticuénticos”.
Durante este camino, que ya lleva más de quince años, han viajado por el interior nuestro, de Norte a Sur, hasta, incluso, Ushuaia, pero, además, han visitado varios países de Latinoamérica. “Estuvimos en Uruguay muchas veces; en Chile; también estuvimos en Brasil, en Colombia. Este año que pasó fuimos por primera vez a México, y vamos a volver ahora otra vez en abril. En lo que va de 2024, en enero fuimos por primera vez a España; y ya tenemos nuestra gira española para dentro de un año”, cuenta emocionada Ruth Hillar.
Reconoce que viven con “muchísimo agradecimiento” esta posibilidad de llevar su propuesta a tantos lugares, de encontrarse con tanto público cariñoso que los espera, que conoce sus canciones, tanto los éxitos como las novedades. Y eso los sorprende, porque no imaginaban el alcance que podían tener. “Como nos pasó con México y España. Nos encontramos un público para el cual somos como parte de su familia”.
Con miras al futuro, con humildad dice que Canticuénticos piensa seguir en este mismo camino, seguir componiendo canciones nuevas, para sumarlas a las más de sesenta que ya tienen grabadas, y seguir recorriendo un poco el mundo. ¿Cómo? “Mostrando, compartiendo, esto que tanto y tanto nos gusta”.
Completan el grupo: Laura Ibáñez (voz), Cintia Bertolino (voz), Gonzalo Carmelé (bajo y coros), Daniel Bianchi (guitarra, cuatro y coros), Nahuel Ramayo (batería, percusión y coros) y Sebastián Cúneo (producción, iluminación, fotografía y video). También lo integran Javier Escandell (sonido) y Darío Zini (asistencia de escenario, aerófonos, charango y percusión) y Rocío Solís (voz invitada).
Además de en la CCKonex, se presentarán en Cañuelas el 17 de marzo en el Cine Teatro Cañuelas; en Rosario el 23 en el Teatro El Círculo y en Córdoba, el 6 de abril en Quality Espacio.
Para la función del 16 de marzo están en venta las localidades. Esta presentación se suspende por lluvia y se reprograma para el 19 de marzo.
[Fotos: Gentileza Prensa de Canticuénticos]