Los vetos e intentos de prohibir libros volvieron a dispararse en Estados Unidos el año pasado para marcar un nuevo récord, según un reporte de la Asociación de Bibliotecas de Estados Unidos (ALA, por sus siglas en inglés). Un total de 4.240 obras fueron objeto de solicitudes de retirada en bibliotecas públicas y escolares en 2023, señaló la ALA el jueves, un incremento considerable desde el récord anterior de 2.571 títulos en 2022, y la cifra más alta desde que la asociación empezó a documentar esas reclamaciones hace más de 20 años.
Como en los últimos años, muchos de los libros afectados —el 47%— tenían temáticas raciales o LGBTQ. El número de peticiones separadas registrado por la ALA, 1.247, ha bajado en 22 respecto al año pasado. Pero los esfuerzos por censurar docenas o incluso cientos de libros en cada reclamación han aumentado en estados como Florida y Texas, un reflejo de la influencia de organizaciones conservadoras como Moms for Liberty y sitios web como Book Looks y Rated Books.
“Cada petición de prohibir un libro es una petición de negar el derecho constitucional de cada persona de elegir y leer libros que plantean temas importantes e impulsar las voces de los que a menudo se ven silenciados”, dijo en un comunicado Deborah Caldwell-Stone, directora de la Oficina de Libertad Intelectual de la ALA.
Caldwell-Stone dijo estar especialmente preocupada por el incremento de las reclamaciones en bibliotecas públicas, que ahora suponen el 40% de las peticiones, más del doble que en 2022. “Antes oíamos que cuando se eliminaba un libro de una biblioteca escalar, el niño aún podía conseguirlo en la biblioteca local”, dijo. “Ahora vemos que los mismos grupos (...) reclaman que se eliminen los libros de las bibliotecas públicas”.
La asociación publicará el mes próximo su lista anual de libros más impugnados. La novela gráfica biográfica Gender Queer de Maia Kobabe ha liderado la lista los dos últimos años, seguida de otras publicaciones criticadas como Lawn Boy, de Jonathan Evison; TheAbsolutely True Diary of a Part-Time Indian, de Sherman Alexie, y The Bluest Eye, de la premio nobel Tony Morrison.
Las cifras de ALA se basan en noticias en medios y reportes enviados por bibliotecarios. La asociación cree que muchas peticiones quedan sin registrar, o que algunos libros son retirados por los bibliotecarios en previsión de las protestas.
Por otra parte, para hacer frente a estas acciones, el lunes 11 de marzo, la biblioteca móvil Rainbow Books hará una parada en Tallahassee, Florida, ofrecerá acceso a libros que fomentan la cultura LGBTQ+ y que han sido cuestionados o restringidos por diversas legislaciones, así lo reportó el medio Diario las Américas. El proyecto busca confrontar las medidas antiinclusivas al proporcionar recursos literarios a comunidades marginadas y promoviendo el debate y la comprensión a través de la literatura.
Esta visita a la capital del estado está incluida en la primera gira nacional del Rainbow Books Bus, un proyecto que vio su inicio en 2022 durante el evento LA Pride y que ha participado en varias ferias del libro a lo largo del país. Adams Powell, uno de los cofundadores del proyecto, señaló a medios locales como BNN, que la presencia del colorido autobús lleno de libros es una respuesta al odio y la discriminación, proponiendo una alternativa pacífica y educativa frente a la intolerancia.
Fuente AP