La obra Manuel del artista Rodrigo Muñoz Ballester, una escultura que estuvo en ARCO en 1983 y que entonces generó polémica, es la que pieza que más atención mediática acapara en la apertura de la feria.
La obra, que muestra dos figuras masculinas –una de ellas completamente desnuda– se vende por 80.000 euros, y para el galerista José de la Mano es “una pieza fundamental del arte gay español”.
No es la primera vez que la pieza causa sensación. La obra estuvo en ARCO en 1983 –una de las primeras ediciones de la feria– y la organización quiso retirarla por el revuelo que causó. “Fue un escándalo maravilloso”, dice el artista, que recuerda que atrajo la atención de todos desde la artista Maruja Mallo hasta las señoras de la limpieza de la feria. Juana de Aizpuru, que era entonces la directora de la feria, quería retirarla pero su galerista se opuso, recuerda.
Manuel fue un amor platónico del artista en los setenta, lo conoció en una piscina y se conocieron durante seis meses, pero nunca pasó nada. Su historia se hizo popular gracias al cómic del mismo nombre que apareció en la revista La Luna de Madrid –fue reeditado hace unos años por la editorial Cielo Eléctrico– y que se considera todo un hito porque ayudó a normalizar las relaciones homosexuales.
El artista ha desempolvado para la ocasión parte de su archivo y trae a la feria el estudio fotográfico que le hizo a Manuel y una serie de bocetos de la obra.
La obra está enmarcada en un proyecto de recuperación de siete artistas gay de la Galería José de la Mano que trabajaron durante la Transición española. Además de Rodrigo Muñoz Ballester, se encuentran el dúo Costus, Carlos Forns Bardá, Roberto González Fernández, Juan Hidalgo y Julujama.
Fuente: EFE