La nominación de Maite Alberdi al Oscar a mejor documental por La memoria infinita es un triunfo que va más allá de la categoría. Celebrando un logro histórico para el cine de su país, Alberdi destaca la nominación en la categoría de mejor fotografía para El Conde de Pablo Larraín, marcando la primera vez que Chile logra dos nominaciones en los Oscar.
Desde Park City, en el Festival de Sundance, Alberdi reflexiona sobre la campaña de promoción de La memoria infinita, comparándola con la experiencia de El agente topo. Destaca los desafíos personales enfrentados este año, con una mayor competencia y compromisos públicos.
Esta es la segunda nominación al Oscar para Alberdi, quien se siente orgullosa de representar a Chile en una categoría que ha sido tradicionalmente cerrada para la industria estadounidense. Según ella, este año “había 167 películas y éramos la única en español. Creo que esto me llena de orgullo, el haber encontrado un lugar en una sección, la documental, que siempre ha estado muy cerrada para la industria norteamericana y sentir que mi filmografía tiene un espacio ahí, en una sección también que siempre ha sido históricamente muy conservadora en su forma de entender el documental como más informativo”.
La memoria infinita, rodada durante cinco años, narra la historia de Paulina Urrutia y el periodista Augusto Góngora, abordando el Alzheimer y la construcción de una memoria compartida. La cineasta destaca la excepcional relación entre los protagonistas y la recepción global que ha conmovido a audiencias de todo el mundo. El protagonista fue encargado del área cultural de Televisión Nacional de Chile durante las décadas de 1990 y 2000 y miembro de su directorio entre 2016 y 2017, al que conoció ya con la enfermedad en la universidad donde trabajaba.
Alberdi subraya la diferencia que hizo la participación de MTV Paramount en la distribución masiva de la película, destacando tanto en salas como en plataformas de streaming. Resalta la estrategia de posicionar la película como una “historia de amor” más que centrarse solo en el Alzheimer, conectando con la audiencia de Hollywood.
“Para entender un poco, es una película que se ha posicionado en Estados Unidos ante todo como una historia de amor, donde el Alzheimer es un contexto, donde no es el tema central de la película, pero por supuesto que hablamos de los cuidados. Y muchas personas de la industria hollywoodense conectan con el tema”, afirmó. “Pero yo creo que ante todo lo que hemos hecho como estrategia internacional es posicionarla como una historia de amor y un relato sobre la memoria histórica y la memoria”, explicó.
En el plano personal, Alberdi aseguró que la nominación “es importante por muchas cosas. Como siempre, te regala la posibilidad de seguir filmando, que es la gracia de los premios, como que a mí me facilita poder decirle también a los productores en Estados Unidos que todas estas películas así pueden llegar a Hollywood y creo que es lo que me interesa promover”.
La película, que se convirtió en el documental más visto en la historia del cine chileno después de su estreno en 2023, lleva consigo un legado significativo. La trágica muerte de Augusto Góngora en mayo pasado resalta la importancia de su historia y el impacto duradero de La memoria infinita.
Maite Alberdi celebra no solo su nominación al Oscar sino también el logro histórico para el cine chileno. Desde el reconocimiento en Sundance hasta la resonancia global de La memoria infinita, la cineasta destaca el poder de contar historias auténticas que trascienden fronteras y generaciones. Ella aseguró que su nominación es un premio en sí mismo y se sintió orgullosa de que el cine de su país lograra hoy un hito histórico al conseguir, por primera vez, dos nominaciones a los galardones de la Academia de Hollywood.
Fuente EFE