El esquivo artista Banksy instaló su obra más reciente en una esquina en Londres, donde permaneció apenas una hora después de que el grafitero lo publicara el viernes en su cuenta de Instagram. Una señal roja de Stop con tres drones militares sobre su superficie octogonal roja fue retirada por un hombre con cizallas mientras los transeúntes tomaban fotos en Peckham, un barrio del sur de Londres.
La gente que comentó el mensaje de Banksy en Instagram pronosticó con acierto que no permanecería por mucho tiempo en el lugar. Algunas de sus obras se han vendido por decenas de millones de dólares. “Fui a verla antes de que le sucediera algo”, dijo un hombre que se identificó como Alex a la agencia Press Association.
La escena fue filmada por testigos y los medios de comunicación británicos difundieron esos registros. Varios transeúntes observaron atónitos cuando un hombre con una chaqueta negra y roja se trepó a una bicicleta apoyada en el poste que sostenía la señal y empezó a golpearla con las manos. “Le dijimos ‘¿qué estás haciendo?’, pero nadie sabía qué hacer, así que solo miramos lo que sucedía”, dijo Alex. “Estábamos un poco confundidos, hubo ruido de bocinas de autos”.
El hombre se fue y regresó minutos después con las cizallas para terminar la tarea. Otro hombre sostuvo la bicicleta sobre la cual estaba parado y luego la quitó y se fue corriendo. Contactada por la agencia AFP, la policía de Londres dijo que no había recibido ninguna llamada al respecto.
Varias obras de Banksy han sido robadas en el pasado, incluyendo una en la sala de conciertos parisina Bataclan, que rendía homenaje a las víctimas del atentado yihadista del 13 de noviembre de 2015 en la capital francesa.
El arte callejero de este artista, que se empeña en ocultar su identidad, suele interpretarse como una declaración política. Muchos de sus seguidores en Instagram interpretaron esta obra como un llamado al cese de fuego en Gaza.
Con información de AP y AFP