A un mes de ser levemente dañada por una organización ambientalista que utilizó la metodología de ataque como forma de denuncia contra los abusos al planeta, La Venus del espejo, la pintura icónica pintada entre 1650 y 1651 por Diego Velázquez, vuelve a exhibirse en la National Gallery de Londres.
El equipo de restauración estuvo trabajando sobre “los daños menores” que sufrió la pintura, luego de que el último 6 de noviembre dos activistas de la organización Just Stop Oil atacaron a martillazos el vidrio que protegía a la emblemática pintura y cometieron daños menores al emblemático y antiquísimo lienzo.
En un comunicado, el museo londinense explicó que la obra fue sometida a “un tratamiento de conservación por los daños menores sufridos en la superficie de la pintura” y que se le colocó un nuevo cristal. “Estamos encantados de tenerla nuevamente en exhibición”, agregó el texto citado por el diario español ABC.
La Venus del espejo fue pintado por Diego Velázquez entre 1650 y 1651. Se trata de la única representación de un desnudo femenino conservado hasta la actualidad del artista y tiene una gran importancia para la Historia del Arte porque la figura mitológica de Venus es revelada de forma muy realista.
El del 6 de noviembre pasado no fue el primer ataque del que fue blanco la obra del maestro sevillano: hace casi 110 años atrás, en 1914, Mary Richardson ejecutó siete cuchilladas al lienzo de Velázquez en demanda de la liberación de Emmeline Pankhurst, líder del movimiento sufragista británico, detenida por reclamar su derecho al voto. Richardson se plantó frente al cuadro, tomó el cuchillo que llevaba camuflado en su abrigo y cortó la tela siete veces con él.
“He tratado de destruir la imagen de la mujer más bella de la historia mitológica como protesta contra el Gobierno por destruir a la señora Pankhurst, que es el personaje más bello de la historia moderna”, había explicado en su momento la mujer que resultó condenada a seis meses de prisión, a raíz del atentado que causó un daño notablemente a la tela de Velázquez, restaurada finalmente tras años de trabajo.
Un siglo después de aquel episodio, la pintura volvió a ser la elegida para denunciar, ésta vez ya no por las mujeres sino por el medio ambiente. “Las mujeres no consiguieron el derecho al voto votando. Es la hora de la acción, no de las palabras. Es el momento de abandonar el petróleo. Si amamos la historia, si amamos el arte, si amamos a nuestras familias, debemos abandonar el petróleo”, manifestó en las redes el grupo ecologista nacido en febrero de 2022, cuando demandó al gobierno británico el fin de la producción de combustibles fósiles.
Fuente: Telam