El Museo de Arte Moderno de Buenos Aires (Mamba) dio a conocer los finalistas de la quinta edición del Premio Azcuy, un concurso que alienta a artistas y colectivos de todo el país a enviar sus proyectos para espacios comunes de un edificio de vivienda.
En esta edición, más de 200 artistas participaron enviando sus proyectos, todos ellos dirigidos a adornar el nuevo edificio Donna Fiore, ubicado en el vibrante barrio de Caballito. Después de semanas de rigurosa evaluación de todas las propuestas, el jurado se reunió en el Museo para debatir y seleccionar las obras finalistas.
Las seis propuestas finalistas de esta quinta edición son las siguientes:
Nicolás Bacal con Las líneas paralelas se cruzan en el infinito, una instalación que presenta largas cuerdas de piano que atraviesan verticalmente todo el edificio, desde el hall hasta las terrazas, generando una gran caja de resonancia.
Nacha Canvas con Suave-star, una serie de esculturas que exploran la relación entre gomaespuma y arcilla, dos materiales opuestos en su naturaleza simbólica.
Martín Carrizo con Algunos planetas arrastrados por la creciente de un río, una escultura compuesta por módulos de ladrillos cilíndricos que evoca la imagen de constelaciones astrales atravesadas por el crecimiento de un río.
Manuel Coll con La luz de las flores, un proyecto que se basa en la revisión de objetos decorativos históricos y piezas de motivos florales que adornaban los edificios de Buenos Aires en el siglo XIX y principios del XX.
Marcolina Dipierro con Ramificación, composiciones formales que utilizan cintas metálicas y diversos cuerpos para crear una espacialidad que provoque una pluralidad de interpretaciones.
Julián Terán con La casa del sol, una instalación realizada con ladrillos de barro artesanales que recrea antiguos cimientos y cartas solares estereográficas.
Los finalistas recibirán un premio estímulo de US$1.000 dólares para desarrollar sus proyectos con mayor profundidad, y la exposición de estas obras ampliadas determinará la obra ganadora, que se revelará en noviembre. El artista galardonado recibirá un premio de US$10.000 dólares además de los costos de producción de su trabajo, que se instalará en el edificio Donna Fiore, desarrollado por Azcuy.
Creado por la Fundación Azcuy en alianza con el Museo de Arte Moderno, el premio permitió que varios artistas emplazaran obras en las áreas comunes de edificios nuevos: en ese marco se inauguró Mutanti, una escultura de Diego Bianchi, ganador en 2019, que se despliega como una lombriz de metal y funciona como receptor de desechos orgánicos. A su vez, las obras de Adriana Bustos y Fabián Bercic, ganadores en 2020 y 2022, esperan su debut en otros dos edificios de próxima inauguración. Mientras que la ganadora del 2023, Sonos, de Hernán Soriano, está en proceso de materialización.
El jurado de la edición 2023 está compuesto por destacados nombres en el mundo del arte, como Victoria Noorthoorn, directora del Mamba, y Diana Campbell Betancourt, directora artística de la Samdani Art Foundation, entre otros.
Azcuy es una compañía creativa de real estate con más de tres décadas de experiencia en el desarrollo de arquitectura residencial en el barrio de Caballito en Buenos Aires. Su enfoque se centra en la sostenibilidad y la creación de espacios de calidad que promuevan el bienestar a largo plazo.
Fuente: Telam