Los Minimax y el cazador de talentos es la última creación del grupo de teatro independiente Los internacionales teatro ensamble. Es una comedia, cargada de humor, de poesía, y de historia y política.
Nos situamos en 1969, recordemos, dictadura de Juan Carlos Onganía, año de la llegada del hombre a la luna, año del Cordobazo y de la visita de Nelson Rockefeller al país. Con estos acontecimientos históricos, y con elementos de la ciencia ficción y del mundo de las historietas es que armamos el entramado de situaciones para estructurar la comedia.
Rockefeller enviado por el presidente Nixon llegó al país a reunirse con Onganía, con empresarios e industriales locales, con figuras de la cultura, el arte y la intelectualidad, como parte de la gira diplomática que venía realizando por distintos países del continente.
En repudio a esta visita y a las políticas norteamericanas para américa latina y el Caribe, y lo que los yankis estaban haciendo en Vietnam, el 26 de junio por la madrugada 14 supermercados de la cadena Minimax propiedad de la familia Rockefeller fueron prendidos fuego por un grupo de revolucionarios.
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Este hecho poco recordado en la historia argentina es el que me disparó a escribir esta comedia, porque es una acción que tiene elementos de lo “espectacular”, ya que se hizo en silencio, desde la clandestinidad, con una precisión de relojería increíble y con una contundencia inusitada. Hubo organización, hubo inteligencia, hubo un hacer y un conocimiento revolucionario. En silencio ha tenido que ser dijo José Martí, premisa que tomamos para la obra, y la distinguimos y subrayamos, incluso en estos tiempos donde lo único que parece valer es la propaganda de todo gesto y acción, incluso en estos tiempos de realidad virtual o paralela donde se niega la verdad o se construye una a medida, escenario ideal para la reacción o para los macartistas de todas latitudes.
Pero decía, hombres y mujeres que resisten la dictadura, la represión, la opresión y la violencia, luchan y combaten, expresan las ideas y los sentimientos de su pueblo, y constituyen, como nos planteará Oesterheld en el Eternauta, el Héroe colectivo.
Hace años que trabajamos y vamos a la búsqueda de un teatro épico y latinoamericano, un teatro que nos represente como teatreros de esta generación, un teatro que extrapolando la frase de Marx pueda ser: Nacional en su forma, internacional en su contenido.
En la obra de los Minimax nuestros personajes son extremos, están al límite, son felizmente contradictorios. Un imitador de Elvis ceceoso, una monja embarazada que imita a Churchill, un mimo que habla y es delegado gremial, un asesino y un caníbal que juntos armaron una cooperativa etc. También aparece en escena un vendedor de copitos y el linkeo inmediato y buscado es al aberrante y NO INVESTIGADO intento de magnicidio a la vicepresidenta de la nación Cristina Fernández.
Menciono esto porque los Minimax trazan una circularidad y repetición histórica, un viaje en tiempo donde descubrimos similitudes y diferencias, luces y sombras y porque además no hay temor de entrar a hablar de temas coyunturales, porque no hay temor de ser tildados de panfletarios, o de lo que sea, ya que lo nuestro es un teatro vivo y franco. Y desde allí miramos, opinamos y colaboramos a transformar las cosas que creemos deben ser transformadas. Así mismo y por si no quedó claro hasta aquí, nuestra posición es humanista y por ello es anticapitalista y antiimperialista, pero por sobre todas las cosas, somos Antifascistas (Nada más oportuno en este tiempo actual).
Pero esta suerte de runfla o brigada Brancaleone que nuestros personajes en Los Minimax y el cazador de talentos expresan, además de tallar cómicamente la escena, configura la idea que los hacedores de la historia y de las cosas no son “puros”, son contradictorios, imperfectos, y por ello humanos.
Nuestra vocación es desatender el bronce épico, el relato del viaje del héroe, de la epopeya. Creo que existen gestos y motivos sociales que están cargados de heroísmo y es preciso poner en relieve, para poder analizarlos, comprenderlos y en el mejor de los casos emularlos, copiarlos, y que sean un motor del entusiasmo.
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Muchas veces la idea del héroe o heroína, de los y las próceres presentan una distancia y una descontextualización que los deshumaniza, y esto lo único que hace es volverlos ajenos, fríos y distantes. Por otra parte, el apuro de individualizar a la figura heroica, otra vez elimina la posibilidad de conocer o intentar aproximarnos a la comprensión del sujeto o de los hechos, ya que aparece un relato unipersonal y excluyente, y los hechos parecen ser producidos por personas iluminadas por una entidad divina.
Creo que es una tarea indispensable visitar la historia para descubrir este presente y sin dudas proyectar un futuro social, ¿las implicancias de Caseros o de la guerra de la Triple Alianza pueden reconocerse o rastrearse en circunstancias o acontecimientos al parecer corrientes u ordinarios, en posiciones, intereses y conciencias de la escena política y social actual? Diría que sí, con total seguridad. ¿Desatender el reclamo genuino por la soberanía de nuestras islas Malvinas en los foros internacionales, es un gesto de subordinación política a las potencias imperialistas, gestos genuflexos y colonizados que tiene la intención de demostrar alineamiento y estrega económica del país? Podría leerse de esa forma, y ni que hablar de aprobar una ley antiterrorista a pedido del pentágono y la Casa Blanca para doblegar movilizaciones populares.
En fin, en todas estas acciones operan distintas fuerzas, grupos, clases, colectivos etc. y aquí se podrán ver y distinguir los gestos más comunes y silvestres, los más dramáticos o cómicos, los más patéticos y oscuros, como también los más valientes y heroicos, cargados de épica.
Es el interés de mi grupo teatral entrar en este abismo de contradicciones, porque entendemos que la contradicción es el motor dialéctico de la historia, porque a partir de esa farragosa lucha de clases es que se puede fundar lo nuevo, tanto las utopías sociales como un verdadero teatro de vanguardia.
* Actor-director-dramaturgo. Los Minimax y el cazador de talentos se presenta todos los sábados a las 22.30 hs. en el Centro Cultural de la Cooperación, Av. Corrientes 1543.
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