La sudestada, la primera ficción de Daniel Casabé y Edgardo Dieleke llegó a las salas argentinas. Se trata de una comedia que juega con lo documental y el thriller hitchcockiano. Se trata de una adaptación de la novela gráfica homónima del artista Juan Sáenz Valiente. “Con Edgardo nos gusta transitar un poco entre la ficción y el documental, incluir elementos de ambos mundos en las cosas que hacemos y también elegimos esa línea en cuanto a los géneros. La película es una mezcla de géneros en un punto, es difícil definirla porque a priori puede ser un film noir, detectivesca, con elementos policiales, por momentos se va hacia la danza o una película más romántica y por otros es una comedia o algo más experimental”, remarcó uno de sus directores, Daniel Casabé.
Luego del documental La forma exacta de las islas, los directores argentino vuelven a filmar juntos en una ficción difícil de definir. El film se centra en la historia de Jorge “el Sabueso” Villafañez (Juan Carrasco), un detective privado solitario, machista y egoísta que es contratado por el marido de Elvira (Katja Alemann), una famosa coreógrafa, para perseguirla. Él quedará cautivado con ella y se desencadenará una serie de eventos inesperados. Todo sumergido en las atrapantes atmósferas del delta bonaerense y la ciudad de Buenos Aires.
Este investigador muy particular terminará seducido e impactado por la bailarina que tiene que perseguir, al igual que una sirena, con sus movimientos y sus bailes logrará hacerle perder ese eje y esa frialdad que lo caracterizaba. Al ingresar la danza, aparece un costado onírico de los protagonistas que también tendrá un sustento documental con las imágenes de archivo de la actriz. Cuando ambos se vean cara a cara, comenzará una relación que mezclará lo absurdo con el suspenso y el misterio sobre qué pasará cuando este profesional no pueda cumplir con el objetivo que se le encomendó.
“Estamos felices porque tuvo una gran repercusión, estuvo pasando un poco lo que queríamos que era rescatar la figura de Katja como artista y tuvimos muchos mensajes de gente que fue al cine y salió muy emocionada, muchos están recomendando la película y el boca en boca está funcionando bárbaro, eso ayudará para que permanezca mucho más tiempo en las salas. Esa respuesta del público es clave para este tipo de películas argentinas no tan comerciales”, comentó Casabé.
A diferencia del cómic, la incorporación de Katja Alemann le da todo un aspecto documental, ya que aparecen fotos y material audiovisual suyos junto a fragmentos de películas experimentales que hizo en los años 70. Además, la danza cobra un papel fundamental: se ven fragmentos de la obra “Adentro”, de la coreógrafa Diana Szeinblum y también ella se involucró de manera directa aportando su equipo de bailarines (integrado por Pablo Castronovo, Bárbara Hang y Andrés Molina) y convirtiéndose en la coach de baile de Katja y Juan Carrasco.
Sobre su manera diferencial de contar y buscar diferentes historias, el director relató: “Nos interesa mucho que las historias que contamos y cómo lo hacemos reflejen de donde venimos y no sea algo prefabricado. Nuestra intención fue tratar de desarmar una historia y un género clásico con elementos bien porteños también en un punto y con una figura como Katja y mezclar también distintas artes en una pieza audiovisual que pueda generar sensaciones y sentimientos distintos. Nos parecía una apuesta muy fuerte y la verdad estamos muy contentos porque está funcionando. Se puede hacer cine que no sea solamente basado en una fórmula de entretenimiento y que tenga cierta novedad e interpele de alguna manera al espectador para qué la pasé bien, se vaya contento y pensando al mismo tiempo. Hay mucha gente que la fue a ver dos o tres veces porque querían ver algún detalle, releer alguna escena, repensarla y eso es hermoso. Apostamos por tener diversidad en el cine y que no se repitan todo el tiempo las mismas cosas, recuperando íconos y elementos muy argentinos”.
Otro de los encantos de la película es el uso de los exteriores, una Buenos Aires más costumbrista con sus bares y sus negocios antiguos y un Delta que deslumbrará con la inmensidad del río y lo verde de la atmósfera. Será los dos escenarios que dividan aquellos de lo cotidiano sobre ese paisaje natural que quiebra y da un vuelo poético
* La sudestada, de Daniel Casabé y Edgardo Dieleke, se estrenó en salas de Argentina el pasado 11 de mayo.
Seguir leyendo