Los calcos de las tres “Piedad” de Miguel Ángel se exhiben en los Museos Vaticanos

Compuestos entre el siglo XIX y el XX, los moldes de yeso exhibidos al público permiten admirar la sensibilidad artística del gran maestro y su evolución a lo largo de una vida

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Imagen de la escultura La
Imagen de la escultura La Piedad de Bandini de Miguel Ángel exhibida en el Museo de la Opera del Duomo en Florencia, Italia. Enero 20, 2022. REUTERS/Jennifer Lorenzini

Los Museos Vaticanos exponen por primera vez los calcos de las tres esculturas que reflejan la Piedad, la Virgen que tiene a Cristo entre sus brazos tras bajarlo de la cruz, que realizó el genio renacentista Miguel Ángel Buonarroti, gracias al préstamo del Liceo Artístico de Porta Romana de Florencia, que posee uno de ellos.

La exposición está instalada en la entrada de la Pinacoteca Vaticana y permitirá a los visitantes “admirar la extraordinaria plástica de Buonarroti a través de los tres calcos de yeso realizados entre los siglos XIX y XX de sus famosas representaciones de la Piedad: la Vaticana, la Bandini y la Rondanini”.

“La exposición nace con la intención de ofrecer al público del museo un alimento para la reflexión a través de las tres conmovedoras Piedad del gran maestro florentino realizadas al servicio de la Fe” y coincidiendo con la Semana Santa, comentó en una nota la directora de los Museos Vaticanos, Barbara Jatta.

Visibles hasta el 6 de enero de 2024 y colocadas una al lado de la otra, “las tres obras de yeso ofrecerán la oportunidad de estudiar la evolución del arte de Miguel Ángel, así como su maduración espiritual, desde su primera juventud, cuando en Roma esculpió la primera Piedad, que se encuentra en la nave norte de la Basílica, a la plena madurez expresada en la Bandini en Florencia, hasta su última temporada cuando, ya anciano, puso su mano en la Rondanini en el Castello Sforzesco de Milán”.

Rondanini, la última Piedad que
Rondanini, la última Piedad que esculpió Miguel Ángel, exhibida el año pasado junto a sus otras versiones en la Opera del Duomo. REUTERS/Jennifer Lorenzini

Estas muestras hablan de la sensibilidad que Buonarroti alcanzó durante su larga vida, explican los Museos Vaticanos “desde la grandiosa obra temprana de su estilo clasicista hasta la escultura inacabada de sus últimos días”. Pues más de sesenta años separan la primera Piedad del Vaticano de la última.

El calco de la Piedad de San Pedro del Vaticano se realizó en 1975 en el Laboratorio de Calcos y Escayolas de los Museos Vaticanos por Ulderico Grispigni tras el ataque que sufrió la escultura en 1972 cuando un hombre la golpeó con un martillo y se hizo necesaria la preparación de un nuevo molde.

El calco de la Piedad que se encuentra en la Iglesia de Santa María del Fiore de Florencia, la Piedad Bandini, conservada en la colección de la Gipsoteca florentina del Istituto d’Arte di Porta Romana, data de alrededor de 1882 y se debe al moldeador florentino Oronzo Lelli.

La Piedad del Vaticano, en
La Piedad del Vaticano, en la basílica de San Pedro

Por último, el molde de la Piedad Rondanini se encargó en 1953 al moldeador milanés Cesare Gariboldi con el fin de determinar de la mejor manera posible y con total seguridad, durante las pruebas de colocación de la estatua de mármol, el emplazamiento ideal para la escultura original, que se conserva en el Castello Sforzesco de Milán desde 1952.

Fuente: EFE

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