Con la muestra Domingo Di Stefano. Homenaje, Towpyha Galería recupera una etapa poco difundida de la obra de este artista de 96 años, que constituyó un aporte al período de expansión del arte abstracto argentino. La exhibición reúne dibujos, pinturas sobre tela y papel, collages y proyectos de diseño gráfico realizados entre los años 50 y el comienzo de los 60 por Di Stefano, nacido en Teramo, Italia, en 1926.
En su formación plástica, Di Stefano reconoce a Marcos Tiglio –quien lo formó en dibujo–, a Victorica, de quien recibía consejos cuando le acercaba sus trabajos, a Emilio Pettoruti, con quien practicó composición y pintura, y al futurista Enrico Prampolini, cuyo taller frecuentó durante su viaje a Italia en 1953.
En 1946 integró el Grupo Joven junto a Víctor Magariños D. y Osvaldo Lucentini, colectivo que fue sumando integrantes a lo largo de los años. Además, fue un miembro activo en las principales agrupaciones que impulsaron la expansión del arte abstracto argentino: desde 1955 exhibió en los salones de Arte Nuevo, en 1958 fue miembro fundador de Artistas No Figurativos de la Argentina (ANFA) y en 1963 de la agrupación de arte Bermellón.
Dictó conferencias y fue profesor de la Escuela-Atelier Paul Klee, dirigida por Adriana Dellepiane, su compañera de toda la vida.
Entre 1958 y 1960 fue asesor artístico de la Galería H, de Buenos Aires. Contratado por la Secretaría de Cultura organizó las Exposiciones Culturales Rodantes que recorrieron varias provincias argentinas. A sus trabajos en dibujo y pintura, sumó la ilustración en diarios y revistas y el diseño de piezas gráficas para difusión de acciones culturales.
Domingo Di Stefano participó en exposiciones colectivas y presentó exhibiciones individuales. Actualmente sus obras se encuentran en numerosas colecciones.
Desde sus primeros trabajos, “se destacan las calidades de una línea aprehendida a partir de los grafismos negros con los que su maestro Marcos Tiglio acentuaba sus retratos y naturalezas muertas –describe María Cristina Rossi en el texto curatorial de la muestra–. Con esos trazos lineales firmes pero sinuosos, Di Stefano tomó apuntes del paisaje boquense junto a Víctor Magariños D., Diana Chalukian y Osvaldo Lucentini –sus amigos de la primera etapa del Grupo Joven–, aunque también adoptó el trazo recto para dibujar pequeñas formas simples que se van encadenando hasta conformar verdaderas construcciones”.
“Por otro lado, el tiempo de formación con Pettoruti había orientado sus pinturas aún figurativas hacia un análisis formal y colorístico que, pronto, se despojó de los modelos de la realidad para concentrar el trabajo sobre la estructura y el equilibrio cromático –continúa Rossi–. Así, en los estudios compositivos de este período prevalecieron las formas concretas, de ángulos muy pronunciados, pintadas con colores planos aunque de paleta vibrante”.
Más adelante, bajo la guía de Prampolini, Di Stefano produjo una serie de obras conocidas como espaciales, que revelan correspondencias con la abstracción dinámica de la última etapa de este maestro, miembro del Movimiento Futurista. Son composiciones realizadas a partir de secuencias de formas curvas discontinuas, cruzadas por algunas líneas rectas y ubicadas sobre fondos muy luminosos. Trazada con precisión, “esa sucesión ritmada de curvas enfatiza el tratamiento espacial mediante el uso del color, grafismos, sombreados y transparencias”, señala el texto curatorial.
Los rasgos de estos dibujos y pinturas de carácter abstracto también se alojaron en los trabajos desarrollados en el área del diseño y la decoración mural. A mediados de los años 50, Di Stefano llevó una composición espacial a la pared, al pintar con óleo un mural de 2 x 3,50 metros en una residencia particular; mientras que los diseños de tapas para libros y para la Revista de Correos y Telecomunicaciones y Posta, las ilustraciones de La Nación y las piezas gráficas realizadas para las campañas de divulgación de las acciones gubernamentales generalmente apelaron a la gramática de su obra constructiva.
En suma, la selección que se exhibe en esta exposición-homenaje expone la obra de un período temprano en la producción de Domingo Di Stefano, en el que compartió el interés por consolidar y expandir el arte moderno con los artistas que integraban el Grupo Joven, la Asociación Arte Nuevo y ANFA. Un conjunto de trabajos que subraya la labor de un artista que, en posesión del dominio técnico, continuó profundizando sus búsquedas y logró imprimir un acento personal a sus investigaciones plásticas.
*Domingo Di Stefano. Homenaje puede visitarse de lunes a viernes de 13 a 19 horas en Towpyha Galería (Tucumán 3148, Ciudad de Buenos Aires).
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