La compra de la editorial Simon & Schuster por parte de Penguin Random House fue vetada por una jueza de Washington debido a los riesgos para la competencia y el principal argumento es que la posición oligopolista dañaba la competencia en el mercado de los anticipos sobre derechos de libros superventas, afectando a los autores. La fusión implicaba que la mayor editorial de Estados Unidos, Penguin Random House, perteneciente al grupo alemán Bertelsmann, comprar Simon & Schuster, el tercer mayor grupo editorial del país, propiedad de Paramount, por 2.175 millones de dólares.
Tal como informó el diario El País de España, fue Florence Pan, la primera jueza asiático-americana del Distrito de Columbia, nombrada por el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, la responsable del fallo celebrado por el Departamento de Justicia de ese país. “La decisión de hoy protege la competencia vital para los libros y es una victoria para los autores, los lectores y el libre intercambio de ideas”, señaló el fiscal general adjunto Jonathan Kanter, de la División Antimonopolio.
“La fusión propuesta habría reducido la competencia, rebajado la remuneración de los autores, disminuido la amplitud, la profundidad y la diversidad de nuestras historias e ideas y, en última instancia, empobrecido nuestra democracia”, completó. En su resolución, la jueza explica: “Tras el examen del extenso expediente y la cuidadosa consideración de los argumentos de las partes, el tribunal considera que el Gobierno de Estados Unidos ha demostrado que el efecto de la fusión propuesta puede disminuir sustancialmente la competencia en el mercado de los anticipos de derechos de publicación en Estados Unidos de los libros más vendidos”.
La sentencia completa aún no se ha hecho pública, porque alberga contenido confidencial y las partes tienen derecho a solicitar que sea ocultado antes de que se difunda el fallo, consignó el diario español. En noviembre de 2021, el Departamento de Justicia anunció su acción contra la fusión acordada en 2020, alegando que esta adquisición le daría a Penguin Random House el control de casi la mitad del mercado de anticipos para la adquisición de derechos de publicación de los libros más vendidos, dejando a cientos de autores con menos opciones e influencia.
El planteo sostenía que el propio grupo Bertelsmann consideraba el mercado editorial estadounidense como un “oligopolio” y su adquisición de Simon & Schuster pretendía “cimentar” su posición como editor dominante en Estados Unidos. “Los libros han dado forma a la vida pública estadounidense a lo largo de la historia de nuestra nación, y los autores son el alma de la publicación de libros en Estados Unidos”, advertía en un comunicado el fiscal general, Merrick Garland, y subrayaba que “solo cinco editoriales controlan la industria editorial estadounidense. Si se permite que la mayor editorial de libros del mundo adquiera a una de sus mayores rivales, tendrá un control sin precedentes sobre este importante sector”.
Se trata de las compañías Big Five (las cinco grandes) e incluyen, además de Penguin Random House y Simon & Schuster, a HarperCollins (filial de News Corporation, de Rupert Murdoch), Macmillan y Hachette. Por su parte, Penguin Random House anunció, a través de un comunicado, que apelará la sentencia, dijeron que están “muy en desacuerdo con la decisión” y la consideraron “un desafortunado revés para los lectores y los autores”. “Como hemos demostrado a lo largo del juicio, el hecho de que el Departamento de Justicia se centre en los anticipos a los autores mejor pagados del mundo en lugar de en los consumidores o en la intensa competitividad del sector editorial es contrario a su misión de garantizar una competencia leal”, remarcaron.
Este juicio se llevó a cabo en Washington durante la primera mitad de agosto y entre los testigos declaró el escritor Stephen King, cuyas novelas publica el sello de Simon & Schuster. El autor de Cementerio de animales declaró contra esta editorial y se manifestó “preocupado” por lo que pueda suceder de tal fusión valorada en casi 2.200 millones de dólares. A la salida del Tribunal, el maestro del terror le dijo a la prensa: “Estoy aquí porque creo que la consolidación es mala para la competencia”.
“Llevo unos 50 años en el sector del libro. Cuando empecé, había literalmente cientos de editoriales. Una a una fueron absorbidas por otras o cerraron el negocio”, afirmó King, autor de obras como El resplandor, Carrie, Misery, It, Después y muchos más, que durante años publicó sus libros con Simon & Schuster. King consideró que a medida que avanza la concentración editorial, los efectos de ese monopolio recaen en los escritores, a quienes “les resulta cada vez más difícil encontrar dinero suficiente para vivir”. Y lamentó que sus colegas trabajen en “un mundo difícil”. Mientras que los directivos de las dos compañías inmersas en la operación testificaron a favor de la misma, ejecutivos de sus rivales Hachette y HarperCollins lo hicieron en contra.
Fuente: Télam
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