El PEN Club de Escritores Cubanos en el Exilio, filial del PEN Internacional, celebra este sábado su 25 aniversario con un nuevo libro sobre su historia y llevando a cuestas el “estigma” de ser una “organización política” financiada por EE.UU., algo que según su presidente, el poeta Luis de la Paz, “es una falacia”. “Nuestra organización responde a los estatutos del PEN Internacional de escritores, pero estos 25 años hemos tenido que luchar contra una campaña agresiva del Gobierno cubano que nos tilda de escritores ‘de segunda’, de organización política y de estar financiados por la CIA y por el Gobierno americano”, dice de la Paz.
Según el PEN Internacional, una de las primeras ONG del mundo fundada en 1921 por la británica Catherine Amy Dawson Scott, “los Centros PEN son las voces de la literatura y la libertad de expresión en sus respectivos países”. La organización, con sede en Londres y presidida actualmente por el novelista kurdo Burhan Sönmez, está presente en más de 100 países. “Fuimos la primera organización mundial y de escritores en hacer hincapié en que la libertad de expresión y la literatura son inseparables”, declara la organización. Su nombre fue concebido como un acrónimo en inglés de Poetas, Ensayistas, Novelistas (PEN), que luego se amplió a poetas, dramaturgos, editores, ensayistas y novelistas.
Literatura cubana en el exilio
La historia del PEN cubano de escritores se remonta a 1945, cuando el periodista Jorge Mañach, autor de una de las biografías más polémicas sobre José Martí, Martí el apóstol, fundó la filial. Luego se vio interrumpida “largos años”, dice De la Paz, al llegar el Gobierno de Fidel Castro y crearse instituciones culturales como las estatales Casa de las Américas y la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac), que lo “desplazaron”.
El PEN cubano, según De la Paz, dejó de funcionar por las medidas tomadas por el Gobierno a partir de “Palabras de los intelectuales”, discurso que pronunció Castro en la Biblioteca Nacional en 1961, poco después de llegar al poder, en el que dijo la frase: “Dentro la revolución todo, contra la revolución nada”. “Comenzó la censura y muchos tomaron el camino del exilio”, explica el poeta. “Fue en el 64° Congreso del PEN Internacional, celebrado en 1997 en Edimburgo, Escocia, cuando, por votación unánime, se aprobó la creación del PEN Club de Escritores Cubanos en el Exilio, con sede en Miami, la capital del exilio cubano”, recuerda De la Paz, también periodista, radicado en el estado de la Florida.
El poeta y exprisionero político Ángel Cuadra (1931-2021), junto a otros escritores del exilio, fue quien reactivó el centro PEN cubano, en 1997. Durante su cautiverio, Cuadra había sido Miembro de Honor del PEN sueco. Para el escritor cubano Rolando Morelli, “el Pen Club en el exilio debe ser considerado, propiamente hablando, como una continuación del fundado por Mañach”.
“Nos exiliamos para preservar y conservar fuera de la plataforma insular una Cuba ideal, es decir, símbolo y encarnación de lo mejor de nuestras tradiciones”, añade Morelli desde Filadelfia (Pensilvania), donde dirige la editorial La gota de agua, que, según adelantó, prepara un dossier sobre el escritor cubano exiliado en España Gastón Baquero (1914-1997). “Naturalmente, me siento honrado y satisfecho de ser parte de una institución que es referente a nivel mundial, y local, de compromiso con la libertad y su defensa de los escritores”, señaló Morelli, miembro del PEN cubano en el exilio.
En septiembre próximo, De la Paz y Morelli viajarán a Uppsala, Suecia, para participar en el 88 Congreso de PEN International, que tendrá lugar del 27 de ese mes al 1 de octubre. Allí presentarán una resolución donde “se denuncia el encarcelamiento arbitrario de escritores y artistas plásticos y la persecución cada vez mayor hacia los intelectuales”. “En el exilio no tenemos problemas mayores con la libertad de expresión, pero sí abogamos por la falta de ella en la isla. Están forzando al exilio a artistas como Tania Bruguera y Yunior García Aguilera. El Gobierno cubano antiguamente intentaba evitar que te fueras; ahora te invita a que te vayas y no te deja regresar, eso es lo que ocurre ahora”, afirma De la Paz.
Fuente: EFE
SEGUIR LEYENDO