Marinero descalzo en un sofá (Barefoot sailor on a sofa) pintado en Atenas en 1962, es un óleo sobre tela, cuyas medidas son 41 x 50,5 cm, y es parte de la colección de la Fundación Yannis Tsarouchis, que reúne gran parte de la obra del artista. Y es sobre ella que él dijo: “[Es ] Uno de los muchos estudios que hice del natural en 1962, cuando empecé a pintar de nuevo después de un largo período en el que había estado involucrado con el teatro y la ópera”.
En 1982 se inauguró el Museo Tsarouchis de Atenas, situado en la casa-estudio del pintor, en el barrio de Maroussi, y un año antes, la Fundación que lleva su nombre y que tiene su sede en el mismo lugar.
Tsarouchis retrató un mundo profundamente sensual, sobre todo masculino y homoerótico, con imágenes de hombres vulnerables –¿tal vez reflejo de su propio sentir?–, desnudos o con poca ropa. También pintó, aunque con menor frecuencia, imágenes femeninas, que en ese caso suelen caracterizarse por su fortaleza.
En los comienzos de su carrera transitó y experimentó estilos de vanguardia, como el cubismo, el surrealismo y el abstracto, pero, finalmente, se inclinó hacia un clasicismo realista en el cual se vertieron todas estas influencias.
El marinero que protagoniza nuestra belleza del día comparte características físicas con otros de los retratados por Tsarouchis, con cabellera negra u oscura y físico atlético y bronceado. En muchos casos se podría creer que se trata de algún personaje que se repite, tal vez un amante, o él mismo. Otro de los rasgos que vale mencionar es la osadía de presentar desnudos masculinos frontales, en una época que hacerlo era un tabú.
Yannis Tsarouchis nació en una familia burguesa amante de la cultura francesa, estudió en la Escuela de Bellas Artes de Atenas entre 1928 y 1934, donde tuvo como profesor a Konstantinos Parthenis, quien lo introdujo en el arte de vanguardia europeo y lo alejó del academicismo vigente en el arte griego de la época. También recibió clases de Photios Kontoglou, quien le inculcó el amor por el arte bizantino. Tsarouchis se sentía atraído, además, por la arquitectura y los trajes populares. Con Dimitris Pikionis, Kontoglou y Angeliki Hatzimichali, formó parte del movimiento de artistas que reivindicaron la tradición griega en la pintura.
Entre 1935 y 1936 viajó a Estambul, París e Italia. Se deslumbró con el arte del Renacimiento y el Impresionismo. Descubrió las obras de Theophilos Hatzimihail y se vio influenciado por artistas como Henri Matisse y Alberto Giacometti. De Matisse valorará especialmente su capacidad de sintetizar la tradición occidental (que da prioridad al dibujo) con la oriental, que prefiere el color.
A finales de la década de 1930 se organizó en Atenas su primera exposición individual. En 1949 se unió con Nikos Hadjikyriakos-Ghikas, Yannis Moralis, Nikos Nikolaou, Nikos Engonopoulos y Panayiotis Tetsis, entre otros artistas, en el grupo artístico Armos. Es ahí cuando su carrera empezó a tener repercusión internacional: en 1951 realizó exposiciones en París y Londres, y en 1958 participó en la Bienal de Venecia. En 1967 se instaló en París.
Murió en Atenas en 1989.
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