Al principio es silencio, luego rabia. El 25 de noviembre de 2019, en Santiago de Chile, en el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, 2000 mujeres se taparon los ojos con una tela negra y comenzaron a gritar, entonadas y al unísono en una coreografía: “El patriarcado es un juez / que nos juzga por nacer, / y nuestro castigo / es la violencia que no ves”. Se trata de una performance del colectivo feminista Las Tesis, integrado por Daffne Valdés Vargas, Paula Cometa Stange, Lea Cáceres Díaz y Sibila Sotomayor Van Rysseghem. Ellas escribieron esta performance titulada Un violador en tu camino, cuyo video se viralizó en las redes sociales y fue replicado en todo el mundo.
Se realizó por primera vez cinco días antes en Valparaíso, específicamente en la plaza Aníbal Pinto, en la plaza Victoria y frente a la Segunda Comisaría de Carabineros de Chile. La segunda vez fue multitudinaria y los colectivos feministas de países como Argentina, Alemania, Brasil, Estados Unidos, Kenia, Líbano, Marruecos, México, Italia, Isarel, Japón y Rusia, sólo por nombrar algunos, la interpretaron con el mismo fervor. Cada cual en su idioma, dice: “El violador eras tú. / Son los pacos. / Los jueces. / El estado. / El presidente. / El estado opresor es un macho violador”. La performance le valió que fueran incluidas dentro del Time 100 de las personas más influyentes del año 2020 a nivel global.
Y parece que esto recién empieza porque Las Tesis ahora publicaron un libro, el primero de lo que promete ser una larga obra. “¿Todavía quieren saber por qué tenemos rabia?”, se lee en Quemar el miedo, que acaba de llegar a las librerías de América Latina. Escrito por sus cuatro integrantes y con la colaboración de Alejandra Carmona, periodista y escritora, autora del libro El negocio del agua: cómo Chile se convirtió en tierra seca.
En sus 131 páginas, Quemar el miedo reproduce las letras de muchas de las performances de Las Tesis y reflexiona sobre la relación entre el patriarcado y el capitalismo. Es un libro que funciona como un manifiesto. En el texto introductorio, titulado “Nosotras”, presentan este libro como “un regalo subversivo para el mundo”, y que “la subversión sumergida en belleza es revolución”. El siguiente texto, aún más breve, es “Una pequeña aclaración conceptual antes de continuar”. Por ejemplo, definen mujer: “todas aquellas subjetividades que se reconocen como tal, independientemente de sus genitales”. O heteronorma: “imposición social de las relaciones sexoafectivas heterosexuales por sobre otros tipos de relaciones”. Luego, sí, los textos con sus complejidades y sus versos.
Hay citas a autoras feministas, relaciones filosóficas, conceptos, ideas y mucho contenido que intenta alumbrar discusiones por fuera de las ya vertidas en los medios masivos. “Estamos en contra del sistema asesino social y político construido de la mano del capitalismo y el patriarcado. ¿Cómo vamos a encontrar un lugar en un sistema creado exclusivamente desde una perspectiva masculina cisgénero y heterosexual, construido con un cálculo mezquino e indolente, competitivo e inhumano? ¿Qué viene después de la caída del patriarcado? No tenemos idea. Lo único claro es que ahora debe arder. No hay otra forma de hacerlo desaparecer”, se lee.
A mediados del año pasado, el cuerpo policial de Carabineros de Chile denunció a Las Tesis por considerar que un video colgado en sus redes sociales incitaba a enfrentarse a los uniformados con violencia. Frente a esto, más de cincuenta artistas estadounidenses, entre las que figuran las actrices Natalie Portman, Julianne Moore y Eva Longoria y cantantes como Cat Power, firmaron una carta en apoyo al colectivo. En el comunicado se lee: “En 2019, Las Tesis sacudió al mundo al interpretar Un violador en tu camino, una poderosa actuación que denuncia la violencia contra las mujeres y los sistemas opresivos que perpetúan la brutalidad policial, la cultura de la violación y el feminicidio”.
Explican en Quemar el miedo por qué su lucha no es de derecha: “los discursos de odio y discriminación más oscuros y obsoletos, amparados en viejos modelos cristianos conservadores”). Ni tampoco de izquierda: “los que ahora nos reclaman por irrumpir con un discurso feminista cuando en Chile ocurría una revolución social. Como si ambas cosas estuvieran desligadas. Como si tuviéramos que elegir entre lucha de clases o feminismo”. Sino que se trata de una lucha feminista, interseccional y queer: “Lamentablemente, el feminismo en esta lucha tiene enemigos en todas partes. Los antitodo, los antiaborto, los provida fetal, la derecha, la izquierda, la iglesia y el sector conservador, pero incluso el progresista”.
“Mientras sigamos viviendo bajo el paradigma de la articulación entre capitalismo neoliberal y patriarcado, solo encontraremos «mejoras» esporádicas; soluciones parche que, si bien en muchos aspectos, a veces, necesitamos, están lejos de ser suficientes”, escriben Las Tesis en el libro donde, además, desarrollan cómo el amor se ha vuelto disfraz para las peores opresiones, el rol de la policía en la represión social (”juntas ya emprendimos este camino contra el patriarcado, contra todas las formas de opresión. Y no hay vuelta atrás”) y la importancia de la performance como método de denuncia (”para nosotras existe un vínculo inquebrantable y poderoso entre el arte y el activismo”).
El último texto, titulado “Juntas”, concluye así: “Juntas quemamos el pacto de silencio ante tanto abuso y opresión. / Juntas quemamos el miedo”.
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