Las sectas de vez en cuando afloran en la literatura y el cine. Quizás por su excepcionalidad, quizás por su fuerza. Y porque la secta no proclama que lo es. Por el contrario, aspira a desplazar a quien la denomina así, y empezar una nueva era. Para que ello suceda es necesario la conformación de un grupo de cruzados atravesados por el secreto de la secta, que deben sostener. Características muy seductoras para ingresar a las creaciones de la cultura.
Por ejemplo, la señal HBO acaba de estrenar la docuserie llamada The Vow (El voto), que muestra el nuevo tipo de sectas adaptadas a los actuales tiempos del capitalismo. Toma el caso de NXIVM, grupo de superación fundado en 1998 por Keith Raniere y Nancy Salzman y que reclutó a miles de miembros, sobre todo en Estados Unidos y México, entre los que se encontraban CEOs de empresas, estrellas de Hollywood, herederos ricos e hijos de dinastías políticas.
En 2017 salió a la luz, luego de varias denuncias de manipulación, el sector de la organización (que así la llamaban) denominado DOS, compuesto solo por mujeres que rendían pleitesía a Keith Raniere, entre otras cosas, como abusos sexuales y hasta distribución de pornografía infantil. Para quien dudara de que se trataba de una secta con las perversidades típicas. En 2019 Raniere fue condenado por delitos de extorsión, tráfico sexual, trabajo forzoso, conspiración, robo de identidad, y producción y posesión de pornografía infantil. Aún está a la espera de su sentencia, que se espera para las próximas semanas.
Jehane Noujaim y Karim Amer son los realizadores de la producción y tuvieron un alto rol en NXIVM, llegando a los estratos más elevados —por caso, Noujaim llegó a formar parte del círculo áureo de la organización, al punto de integrar el grupo privilegiado de sus siete máximos líderes—. La serie explora esta secta laica, integrada por quienes ostentan dinero y poder a diferencia de las del pasado, y reúne testimonios de sus miembros desencantados por la acción de la prensa y la justicia. Todo muy contemporáneo. Esto hace que la serie transporte a los espectadores dentro de NXIVM a través de los ojos de ex miembros que dedicaron sus vidas a la organización.
No es el caso de la novela de Umberto Eco El nombre de la rosa y la película del mismo nombre. Allí se comenta la historia medieval de los dulcineos, seguidores de Dulcino, quienes practicaban la vida comunitaria, la igualdad entre sus miembros, el amor libre y la oposición a la iglesia católica y a los poderosos —todas formas de practicar el cristianismo que cuestionaban el orden establecido de las cosas—. Si bien la novela no se centra en la secta y su destino, comenta los hechos que terminaron con el pasaje a la clandestinidad de sus miembros, luego de que el papa Clemente V decretó una cruzada que culminó con muerte, cadáveres en hogueras y destrucción. Dulcino fue torturado, como sus más destacados seguidores, hasta la muerte. Marcel Schwob lo cuenta en una de sus Vidas imaginarias.
Más cercano en el tiempo, el suicidio masivo en Guyana ocurrido en 1978 y protagonizado por más de novecientos seguidores del culto de Jim Jones muestra la peligrosidad y actualidad letal de las sectas. La combinación de fe cristiana, marxismo y enfrentamiento a los poderes de Washington llevaron a Jim Jones a decretar la compra de grandes terrenos en Guyana donde asilaría a sus feligreses, en su mayoría negros. Eran sometidos a la esclavitud en nombre de la liberación del trabajo humano. Jones, que actuaba como un líder carismático a quien se debía obediencia, ordenó al recibir a una delegación de la prensa y diputados estadounidenses (a los que mató) que se tomara veneno. Las imágenes que muestran el momento del suicidio mientras Jones realiza su último salmo son espeluznantes y pueden verse en Jonestown: paradise lost.
Una secta que, pese a sus estrafalarios postulados, ganó a seguidores fanáticos es la Cienciología, fundada en los años 50 del siglo pasado por un mediocre escritor de ciencia ficción. Ron L. Hubbard, cuyos postulados sigue la secta, creó una extravagante teoría según la que el ser humano proviene de ovnis llegados miles de años atrás y que se establecieron en el interior de unos volcanes. El legado de los extraterrestres habría llegado a Hubbard para que disemine que todo recuerdo se encuentra alojado en el cerebro, absolutamente todo, incluso el que responde a vidas pasadas. También señaló la maldad de la psiquiatría, confabulada para destruir al ser humano.
Muchos miembros de las troupes hollywoodenses como Tom Cruise, John Travolta o Will Smith pertenecen a la secta, que además promete curar la homosexualidad. En la Argentina también tienen una sede. Phillip Seymour Hoffman y Joaquin Phoenix muestran sus comienzos en The master. John Travolta dirigió una película escrita por su líder que pasó sin pena ni gloria en 1990.
De todo tipo. Las sectas se encuentran en las sociedades y prometen felicidad, sanación y sabiduría. Como para no firmar el carnet de admisión y el cheque requerido para ser parte.
*The Vow: domingos a las 23, hora argentina, exclusivamente en HBO y HBO GO
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