Los desafíos de “La creciente”, la primera película argentina en estrenar online por el coronavirus

Cuando Franco González y Demián Santander terminaron de editar La creciente y se presentaron ante el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales para estrenarla en el segundo trimestre de 2020 nunca imaginaron todo lo que vendría después. El avance del coronavirus obligó a las autoridades de nuestro país a tomar medidas drásticas que limiten la conglomeración de personas a fin de detener este virus. Entre las medidas, está el cierre de las salas de cine de todo el país. Eso obligó a las autoridades del Instituto a realizar diferentes acciones para mitigar las consecuencias negativas que afectan a la industria cinematográfica. Una de ellas fue darles la posibilidad de estrenar en la plataforma de video on demand CINE.AR PLAY y el mencionado film fue el primero que debutó con este novedoso sistema.

La creciente es una ficción filmada íntegramente en la ciudad de San Pedro y se centra en la vida de Matía, un joven marginal que llega escapando a unas islas del río Paraná. Lejos de encontrarse con un lugar de refugio, entra en un ambiente ajeno, hostil e incómodo, donde se generarán tensiones que lo devuelven hacia su pasado delictivo y a tener que enfrentar una vez más la idea de huir para sobrevivir. Allí la idea de “ley de la selva”, típica del western donde sobrevive el más hábil y fuerte, lo hará estar siempre a la defensiva mientras intenta adaptarse a la inmensidad y la belleza de un paisaje de isla que pocas veces ha transitado y muchas veces termina ahogándolo. Infobae Cultura dialogó con sus directores.

- ¿Cómo están viviendo la cuarentena obligatoria, sacando el estreno, tenían algún trabajo o filmación que tuvieron que suspender?

Demián Santander: Sí, por supuesto que no estamos exentos a lo que está sucediendo, se frenaron todos los rodajes, y siendo trabajadores independientes nos encontramos frente a un gran problema económico.

Franco González: En mi caso trabajo en prensa del Ministerio de Salud de la Nación, así que la cuarentena la veo de lejos porque estamos en un momento de bastante trabajo.

- ¿Por qué decidieron acceder al estreno on line?

D.S.: Recibimos la propuesta del estreno online por parte del INCAA debido a este momento atípico que nos encontramos todos por la pandemia. Al principio nos generó dudas, sinceramente hago y pienso cine para una pantalla en una sala, pero creo importante despojarse de esa idea romántica. Vemos esta posibilidad como una experiencia que nos acerca a otro público, a otras generaciones, con el agregado que será gratis por una semana. Además, veo como positivo que llegaremos a las casas, desde la televisión, computadora o hasta un celular se podrá ver la película, donde y cuando quiera. CINE.AR es para todos y eso es sumamente importante.

F.G.: Esta situación particular nos hizo repensar cuestiones relacionadas al estreno y las nuevas experiencias vinculares que surgen con este aislamiento. Creo que es un buen momento para quitarle solemnidad a la idea del estreno y abrirnos a estas nuevas formas, no tan nuevas, pero sí condensadas por este encierro y así llegar a generaciones que quizás no tienen tanto el hábito de ir al cine, sino que su consumo audiovisual se da casi exclusivamente a través de una pantalla más pequeña.

- Yendo a la película, ¿cómo nace el proyecto? ¿Por qué eligieron ir a filmarla a la isla?

F.G.: Al ser de San Pedro es un paisaje que me resulta familiar, de chico hemos incursionado en ese ambiente hermoso y hostil que son las islas del Paraná. Este proyecto nace un poco de eso, de reconectar con un ambiente que dejé de frecuentar asiduamente cuando me vine a Buenos Aires, hace ya más de veinte años. Hay algo ahí que me convocó, después construimos la ficción, pero claramente ese paisaje cultural nos conmueve.

- ¿Qué ocurrió en la ciudad cuando cayeron a filmar? ¿Hubo participación de las personales del lugar?

D.S.: Los isleños y muchos habitantes de la ciudad fueron, primero inspiración para nuestros personajes, y luego de gran apoyo para el desarrollo del rodaje. No obtuvimos ningún apoyo de la Municipalidad lo cual nos hubiese ayudado muchísimo, sobre todo por la inversión económica que realizamos en la ciudad.

- ¿Cómo fue el rodaje en ese lugar que si bien impacta por la belleza puede ser hostil?

D.S.: La locación fue desde el principio el obstáculo a superar. Dependimos mucho del clima, tanto para rodar por la cantidad de escenas en exterior, como para los traslados del equipo técnico. Hicimos un plan de rodaje flexible, teniendo un “plan b” diario, optimizando la primera o última luz del día como prioridad visual. Problemas hubo y muchos, pero menos de los esperados. El clima fue un gran aliado.

- ¿Estos paisajes ayudaron a crear los momentos dramáticos?

D.S.: Queríamos ese paisaje y en estado crudo, por eso elegimos el invierno para filmar. Sauces desnudos, paletas de amarillos, marrones y ocres, y el frío en la piel.

F.G.: Sí, claramente ese lugar cambia mucho en la primavera/verano, es más vivo, verde, y no era lo que pensamos ni para la construcción de los personajes, ni de los ambientes. El frío y el invierno en la isla nos daba la hosquedad, lo seco enjuto, que queríamos como tono dramático.

- ¿Cómo fue la selección de actores protagónicos?

D.S.: La verdad que el casting nos fue muy fácil, a Cristian Salguero lo vimos en La patota, la remake de Santiago Mitre y supimos que era nuestro protagonista. Con Mercedes Burgos bastó un solo encuentro durante el casting para darnos cuenta del enorme talento actoral que tiene.

F.G.: Sabíamos que no sólo buscábamos actores con experiencia en cine y educación actoral, sino que necesitábamos que puedan expresar algo de crudeza en sus miradas. Los encontramos bastante rápido, y en la peli se nota que ponen el cuerpo además de su talento. Se los puede ver ya sea luchando con animales, nadando en el río en pleno invierno o revolviendo vísceras de sábalos.

- ¿Tuvieron en cuenta elementos del western al armar el guión?

F.G.: Nosotros desde un principio queríamos contar un drama que sea lo más duro y al hueso posible, pero no era nuestra intención hacer un western isleño. Sin embargo, a medida que el proyecto fue avanzando nos fuimos dando cuenta que cada vez tenía más elementos del western entonces lo que hicimos fue potenciarlos y condensarlos para llegar a un drama que utiliza esas herramientas.

- ¿Cómo fue el trayecto de la película en festivales, que devolución tuvieron?

D.S.: La película tuvo su estreno a nivel Festivales en el BAFICI, Festival Internacional de Cine de Buenos Aires 2019 con una gran recepción del público, estamos muy agradecidos con el festival y todo lo que sucedió ya que nos dio un gran empuje.

- ¿Qué cosas creés que pueden cambiar en la industria del cine después de la pandemia?

D.S.: No creo que haya cambios profundos por esto, si en cambio, se acentuarán las problemáticas que tenemos en el sector. Pero si tengo ver el lado positivo, creo y espero que mucho más publico vea CINE.AR y sobre todo lo valore, tenemos una plataforma con gran cantidad de cine, ficción, documental y series gratis de gran calidad y variedad. El cine viene atravesando una crisis importante, acentuada por su última gestión. Hoy tenemos una gran fe en esta nueva etapa. Hay muchísimos temas en los cuales trabajar y revisar, desde mi opinión, como es el sistema de puntajes para la selección de películas hasta la distribución en salas.

* La creciente se estrenó el jueves 2 de Abril en CINE.AR TV. En la plataforma CINE.AR PLAY, estará disponible de manera gratuita durante siete días.

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