En uno de los ingresos a Valle viejo, Catamarca, un precioso monumento al aborigen, realizado por el muralista y escultor local Raúl Guzmán, da la bienvenida a un departamento en el que aún conviven ciertos elementos de las culturas prehispánicas. Allí, rodeada por la sierra de Ancasti y el Río del Valle, la joven artista Candelaria Traverso preparó su primera muestra individual en Buenos Aires, Chakana, que se presenta en la galería porteña Herlitzka+Faría, donde realiza una propuesta que trabaja sobre la apropiación de la herencia de los pueblos originarios atravesada por el mundo contemporáneo de las ferias marginales.
Traverso (Córdoba, 1991) comenzó a tener una mayor notoriedad en el ambiente del arte luego de que su obra Periferia fuera adquirida por el español Museo Reina Sofía, en la última edición de arteBA. La pieza, una instalación a partir de una frazada y ornamentos de cerámica, surgió a partir de una investigación de barros nativos y los distintos métodos de quema originaria, mientras realizaba una residencia en Montevideo, Uruguay.
"Mi inserción en el mundo del arte es muy reciente. He estado en ferias, presente con mi cuerpo, y te genera muchas cosas, se generan expectativas, se especula. Una a veces siente como una tensión lógica, eso me sucedía, pero esta vez fue diferente. Había tenido a mi hijo hacía muy pocos días, estaba en una feria de plantas con mi niño en el fular, dando de mamar, cuando me llama Mauro Herlitzka. Me dice '¡Adiviná quién acaba de adquirir una obra?' Y me cuenta que fue el museo, fue tremendo. No tenía expectativa de vender obra, recién estábamos probando con la galería y aconteció. Las viejas del pueblo me decían vas a ver que el bebé viene con el pan bajo el brazo y fue así, tal cual. Después, compré muchas más flores", explicó Traverso a Infobae Cultura.
En aquella obra, Traverso, puso el foco en una parte constitutiva de su vida, las ferias de ropa, ya que la frazada aludía a estos mercados como también la manera en que cada feriante convierte en íntimo una porción de espacio público. Ese espíritu vuelve a presentarse en Chakana.
Traverso comentó que sus inicios con el arte textil se remontan a sus primeros años, cuando su abuela Hilda, "costurera desde siempre", la invitaba a jugar con los retazos y se fortificó a través de su mamá, quien la guió en su camino como feriante.
Y es que además del arte, Traverso se dedica a vender ropa usada: "Tengo una feria que no tiene locación, con la que participo de showrooms y eventos. En Jujuy compraba esta ropa, la vendía en mi lugar de residencia, Córdoba, después lo hice Buenos Aires y ahora, en Catamarca".
Así, comenzó a trabajar con la materialidad de la feria, que va desde la ropa y las etiquetas hasta los bolsones o pacas, denominación que proviene de la agricultura para señalar a aquello que es lo sobrante de un cultivo.
"Una feria como lugar es una experiencia estética muy fuerte, donde se produce una dislocación de la ropa que viene de otras partes del mundo. La ropa, por ejemplo, se manufactura en Tailandia o Vietnam, a partir de eso va al primer mundo, Europa o EE.UU. donde se utiliza y después regresa en forma de donación a lo países pobres, como Bolivia, que es donde yo la compro. Una campera de los Lakers en Villazón ya era una experiencia que me fascinaba", explicó.
En ese sentido, la muestra presenta el gran tapiz Mantamundi: "Me empecé a fascinar con los recorridos. Yo hago un recorrido personal, voy a Jujuy, a Bolivia, y después a la Feria, donde a su vez está todo junto, se reúnen otros recorridos. Después está el recorrido que hace la ropa, que empieza donde se fabrica, el made in".
Mantamundi está compuesto por retazos de acolchados en tonalidades azulinas que contienen un planisferio bordado en el que cientos de etiquetas, con nombres que en el algunos casos buscan realizar su propia apropiación de marcas regionales o globales, y, como explica la artista, revelan el recorrido y la concentración de estas industrias.
"Esta ropa llega en forma de donación. La gente la compra, la usa y la desecha o se desprende. Eso después se prensa, ingresa en estas pacas o fardos coloridos y se envían a Chile, de ahí pasan a Bolivia desde donde comienzan a bajar hasta Tucumán".
En la exhibición también se presentan una serie de grandes tapices y otros más pequeños que giran en torno a la misma estética, la Chakana. Así como también una serie de dibujos de ropas y algunas esculturas que representan cómo se comprime la ropa usada en las pacas para ser donada a los países periféricos.
La Chakana, que significa "escalera" o "puente", es un símbolo plurimilenario de los pueblos originarias de los Andes centrales, con una antigüedad mayor a los 4000 años, que tuvo una gran dispersión territorial con el Tahuantinsuyo, aunque en la actualidad está más asociado a los diseño textiles del pueblo aymara.
En sus piezas, la artista realiza una apropiación de la forma y los representa con los embalajes o pacas asiáticas generando así un puente entre aquellos pueblos fundacionales de la región y las economías informales que florecen en esa misma geografía en el siglo XXI.
–¿Cómo comenzaste a trabajar alrededor de la chakana?
– Empecé con grandes obras, inspirados en los tapices andinos, que son tejidos de aguayo antiguo. Los primeros que hice tienen otra simbología, pero luego comencé a encontrar en la chakana todo un encanto que es el de lo simple, en este elemento que representa la escalera, entre sus cientos de significados, que es una idea de puente, que unifica, que pone en diálogo las distintas esferas, el abajo y el arriba.
-Y de las grandes piezas pasaste a otras más pequeñas
-Sí. La chakana es la síntesis a nivel conceptual de la cosmovisión andina. Estos tapices también son una síntesis.
Traverso se formó en Universidad Nacional de Córdoba en Artes Visuales, especializada en escultura, y participó de diferentes talleres y becas, como la ABC, donde trabajó con Claudio Ongaro Halteman, que la introdujo en la obra del intelectual argentino Rodolfo Kusch, el intelectual argentino que se especializó en el pensamiento indígena y popular americano. Esa experiencia la llevó a los textos del ecuatoriano Bolívar Echeverría, filósofo que también profundizó en los fenómenos culturales e históricos de América Latina y desarrolló el concepto de codigofagía.
En ese sentido, la codigofagía está relacionado con el mestizaje, a través de su proceso histórico poscolonial, a partir del cual diferentes códigos sociales intentan devorarse los unos a los otros.
"La codigofagia viene de muy atrás en el tiempo, desde que se comía al enemigo para aprehender lo bueno y defecar lo malo. En ese sentido, este proceso revela una codigofagía, pero que se produce a partir de todo lo que recibimos de las industrias culturales de otros países del mundo. Nosotros tenemos esos mecanismos que son tan fuertes, que es una apropiación violenta, y eso me parece interesante", explica.
"Mi trabajo tiene mucho de lo antropológico. Creo que la obra refleja, más allá de mi oficio, mi historia y la relación con la feria. Al no ser jujeña, donde viví desde los 8 a los 17 años, yo sentía como una dislocación, porque si bien me sentía parte, no tengo los rasgos. Me costó sentirme de la misma manera que la persona local. Y me parecía interesante poder expresar esa condición de feriante y, por otro lado, el tema de lo ancestral, como sobrevive siempre esa cultura con lo ancestral, independientemente de todos los cambios. Eso en un punto es lo que me sensibiliza, por eso lo señalo, hay un interés de sentir que lo ancestral está latente".
En el futuro Traverso no renuncia a presentar las fotografías que saca de los mercados marginales con su Pentax K1000 analógica: "En una próxima instancia me encantaría exhibirlas. Viajo mucho en esos colectivos truchos, donde también escribo, así que hay además una cosa de la crónica documentada".
De fondo, en la galería, los ruidos de la feria que la artista grabó in situ invisibilizan lo que sucede afuera. Los murmullos de acento norteño se confunden, se mixturan, y si se cierran los ojos la mente puede adueñarse de ellos y trasladarse de una punta a otra, al igual que sucede con la materia que Traverso utiliza en su obra.
*Chakana, de Candelaria Traverso
Herlitzka + Faria, Libertad 1630, Retiro
Hasta el 19 de septiembre
Lunes a Viernes: 11:30 a 19 hs
Entrada gratuita
Fotos: Gentileza de Herlitzka+Faria
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