"Mar distante", una historia sobre la fraternidad con Perón de fondo

El Portón de Sánchez presenta la última obra teatral de Gabriela Izcovich, una comedia dramática en la que dos hermanos, ya de grandes, descubren la existencia del otro con Camarones, un pequeño pueblo de Trelew como escenario

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Por Gabriela Izcovich*

Mar distante (Marco Riccobene)
Mar distante (Marco Riccobene)

Mar distante surge a partir de un deseo de continuidad, de seguir trabajando con Marcelo Bucossi, Mercedes Fraile, y Roberto Castro, con quienes ya lo había hecho en mi obra anterior Siempre hay que irse alguna vez de alguna parte. Cuando se estaba terminando el ciclo nos dio pena separarnos y fue entonces cuando les propuse hacer algo nuevo.

Así comenzó la escritura de Mar distante, que a diferencia de mis espectáculos anteriores, fue escrito mientras se cotejaba en la acción. Se fue escribiendo a medida que ensayábamos. En un momento dado necesité incorporar un nuevo personaje y fue ahí cuando convocamos a Daniel Goglino.

Mar distante narra la historia de dos hermanos que se conocen ya siendo grandes. Hasta ese momento no tenían idea de la existencia del otro. Pocos meses antes de morir la madre de ambos, le confiesa a su hijo que tiene una hermana en la localidad de Camarones, al sur de Trelew. Ellos vivían en la capital, y él decide ir a conocerla. A partir de ese momento se desarrolla la acción.

De alguna manera esta obra es para mí una reflexión acerca de los vínculos y de la conformación familiar. Los vínculos familiares no se eligen, lo cual casi diría que es una cuestión de suerte. Los vínculos elegidos son otra cosa. Sobre todo los elegidos a conciencia. Pienso también, que a medida que nos vamos poniendo grandes, las elecciones son más profundas y los momentos deseados de estar con otro también se hacen más selectivos. Toda esta serie de sensaciones y pensamientos fueron el motor para la conformación del texto.

Es la segunda vez que escribo una obra que acontece en un pueblo o en una pequeña ciudad. No tengo muy claro a qué se debe. Tal vez a una necesidad de generar un clima con menos anonimato del que tienen las ciudades. Un lugar donde todo lo del otro se sabe, donde las puertas de las casas están abiertas, con lo positivo y negativo que esto acarrea.

Gabriela Izcovich
Gabriela Izcovich

No sabía que existía "Camarones". Cuando empecé a escribir la obra me dio ganas de situarla en el Sur de nuestro país. Googleando me topé con este lugar donde existe un Museo que se llama "Museo Perón". Me intrigó. Juan Domingo Perón pasó unos años de su infancia en este lugar. Lo cual, obviamente hizo que la historia se enriqueciera. El museo aparece y pasa a tener un lugar primordial en el relato. Nos apropiamos de ese lugar y su historia.

Siento una gran alegría al ensayar esta obra. Me gusta dirigirla y compartir el escenario actuando con estos actores. Me gusta mucho trabajar con ellos. Se toman el trabajo con seriedad y sensibilidad. Se hacen eco de mis sensaciones y sentimientos y toman el trabajo como propio, lo cual es muy placentero y relajante, porque, de esta forma, entrego y regalo las palabras. También es importante decir, que escribir ya sabiendo quién va a actuar el personaje también es muy gratificante, porque ya visualizo los cuerpos y sus expresiones mientras voy escribiendo sus parlamentos.

Ahora que ya estamos estrenando, me parece que fue ayer cuando estábamos por salir al escenario a hacer función de Siempre hay que irse alguna vez de alguna parte y les dije a los actores: "¿Y si hacemos otra?" Recuerdo la felicidad que me produjo que todos se entusiasmaran con la idea y estimularan el proyecto. Es lindo dar continuidad a las lindas vivencias, atesorarlas, cuidarlas y disfrutarlas.

También lo espacial ha sido cómodo, fue como trabajar en casa. Los ensayos los hicimos algunas veces en mi estudio y muchas otras en el estudio que Marcelo Bucossi tiene en su casa. Y ahora el estreno es en "El Portón de Sánchez" que es el teatro de Roberto Castro. ¡Es decir que la comida sale casera!

Confieso que tenemos un deseo compartido: poder ir algún día a representar la obra a Camarones. No me parece descabellado. Además debo decir que generalmente lo que me propongo lo logro, con tenacidad. Así que quién te dice…

Siempre visten y enriquecen mis espectáculos las músicas que compone mi hijo Lucas Fridman y los preciosos diseños de iluminación de Ricardo Sica. Y el acompañamiento incansable de Marco Riccobene.

 

*Izcovich es autora, directora e integrante del elenco de Mar distante

Mar distante
El Portón de Sánchez, Sánchez de Bustamante 1034.
Sábados a las 20hs
Valor de la entrada: General: $350.-
Descuento estudiantes y jubilados: $300.
Duración de la obra: 60 minutos
Reservas aquí 

 

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