El director de cine Hugo Santiago falleció en París, ciudad en la que pasó la mayor parte de su vida, a los 78 años.
La llegada de Santiago al cine se produjo en Francia, cuando en 1959 fue becado por el Fondo Nacional de las Artes y viajó a París. Allí trabajó como asistente y discípulo del cineasta francés Robert Bresson.
El argentino tuvo una estrecha relación con escritores como Jorge Luis Borges, a quien conoció cuando estudiaba filosofía y literatura en la Universidad de Buenos Aires, como también con Adolfo Bioy Casares, quienes fueron guionistas de su ópera prima Invasión (1969).
Invasión, considerada una película de culto, fue estrenada en la primera edición de la Quincena de los Realizadores del Festival de Cannes y trata sobre la vida en Aquilea, una ciudad sitiada que posee rasgos muy similares a Buenos Aires. Allí, un grupo de hombres intentan defender, con más heroicidad que medios, el bastión de unos invasores, que esperan su momento para dar el golpe final.
Luego, se radicó en Francia, donde volvió a encontrarse con Borges y Bioy Casares para el film Les autres (1974), que provocó un escándalo durante su proyección en Cannes. El film relata la vida de un hombre que atraviesa una serie de metamorfosis cuando intenta conocer cuáles fueron las las causas de la muerte de su hijo.
En 1978 presentó Colloque de chiens y un año después Écoute voir… Allí, la actriz gala Catherine Deneuve interpreta a una suerte de Philip Marlowe femenina, quien a medida que indaga sobre sectas y tecnologías modernas comienza a ser parte de una trama rocambolesca, delirante.
Vuelve a trabajar con un autor argentino, en este caso Juan José Saer, para Las veredas de Saturno (1985), donde retoma la saga de Aquilea a través de la perspectiva de un tanguero exiliado en París. Su última película fue El cielo del centauro (2015), que significó su regreso al país luego de casi cinco décadas y que es considerada como el cierre de la "trilogía Aquilea".
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