La Línea Sarmiento interrumpió su servicio de trenes desde de las 10 horas por la aplicación del protocolo COVID-19 y la empresa Trenes Argentinos informó que dejará de funcionar durante el resto del día.
Hasta el momento, diez empleados dieron positivo para la enfermedad en el Puesto Control Trenes y los contactos estrechos deberán permanecer aislados. Frente a esta situación, la empresa garantizó el servicio de la hora pico de la mañana -entre las 0 y las 10 - con personal jerárquico.
Al no contar con el personal habitual para atender esa área, centro neurálgico de la operación ferroviaria, a partir de ese horario se vio imposibilitada de seguir prestando el servicio. Pese a ello, se continúa trabajando para regularizar el funcionamiento de la línea lo antes posible y desde el Ministerio de Transporte de la Nación pusieron a disposición de los trabajadores micros de apoyo en las estaciones.
Tal es así que para agilizar el traslado de todos los todos los usuarios, en el trayecto que une el barrio porteño de Once con la provincia de Buenos Aires, habrá micros que saldrán durante el resto del día desde las estaciones Morón, Moreno y Once.
Una situación similar se produjo este domingo y el jefe del cuerpo de delegados de esa línea, Rubén “Pollo” Sobrero, ya había advertido que el problema podría repetirse durante el lunes.
Según detalló Sobrero, el inconveniente se produjo en la base operativa de este ferrocarril -ubicada en la localidad bonaerense de Castelar- a pesar que los empleados del área estaban divididos en tres turnos que no se tocan entre sí. “El problema fue que se contagió un supervisor que tuvo contacto con algunas de esas guardias”, contó.
Como se trata de un sector que se encarga del control de las formaciones, no todo el personal de la línea puede ocupar esos puestos porque se requiere una capacitación especial. Por ende, se torna difícil reemplazar a las personas infectadas.
En este sentido, el dirigente gremial puso en duda que el lunes se pueda retomar el servicio con normalidad: “Tenemos que ver si podemos juntar a la gente necesaria para poner operativas todas las mesas: la de eléctrico, la de diésel y la de personal. Si no se puede juntar a esa cantidad de gente, estamos complicados”, había dicho ayer.
“Desde Trenes Argentinos se agradece y se continúa apelando a la responsabilidad individual de cada uno de sus pasajeros y pasajeras para evitar las aglomeraciones en el transporte público debido a la inédita situación que atraviesa el país y el mundo como consecuencia de la pandemia”, informaron en un comunicado de prensa.
Desde el inicio de la pandemia, en las cinco líneas ferroviarias, 449 empleados y empleadas dieron positivos en el test de coronavirus y más de 1600 tuvieron que ser aislados por tener contactos estrechos con los enfermos.
El primer caso en la operadora ferroviaria se presentó 70 días después de que se conociera el primer infectado en el país. A partir de ese momento la curva fue en forma ascendente como en el resto del AMBA, ya que los trabajadores y las trabajadoras de la empresa están comprendidos dentro de las tareas esenciales y no escapan del contacto con el virus.
Además un 30% del personal se encuentra licenciado por ser mayor de 60 años, tener comorbilidades o pertenecer a un grupo de riesgo. Ante esto, los diversos servicios pueden verse afectados cuando la baja de personal se produce en espacios sensibles como el Puesto Control Trenes, conductores o guardatrenes de cualquiera de las cinco líneas del AMBA, dado que son personal especializado indispensable para la circulación de los trenes.
Ante un caso sospechoso, la Operadora Ferroviaria cuenta desde el inicio de la pandemia con un riguroso protocolo COVID que aplica de manera inmediata y responsable, con el fin de preservar la salud de pasajeros y pasajeras y el personal de la empresa.
Ante cualquier duda o consulta el pasajero puede comunicarse con el 0800-222-TREN (8736) o ingresar en www.argentina.gob.ar/transporte/trenes-argentinos.