Tras el resultado positivo de coronavirus del intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, se generó una cadena de contagios que alcanzó a varios de sus funcionarios. En total, se testearon a 11 miembros de su equipo y cinco dieron positivo.
El propio Insaurralde, esta tarde en diálogo con el programa La peña de morfi, donde trabaja su pareja, Jésica Cirio, detalló quienes son los funcionarios contagiados. Se trata del secretario de Gobierno, Martín Choren; su secretaria privada, Victoria Bourio; el director de Compras, Daniel Perfumo; el secretario de Obras Públicas, Emiliano Piergiovanni, y su chofer, Matías Urso. También dijo que el vicepresidente de la Fundación Bapro, Alejandro Alegretti, había dado positivo.
Una vez que se confirmó el resultado positivo Insaurralde, las autoridades médicas salieron a buscar a sus “contactos estrechos”. Así, fueron testados, además de sus colaboradores cercanos, todas las personas que habían visto al intendente en los últimos días. Uno de ellos fue el secretario general de la provincia, Federico Thea, que arrojó un resultado negativo. Luego, fue sometido a un test, el presidente de la cámara de Diputados, Federico Otermín, que pasadas las 17 informó desde su cuenta en Twitter que también dio negativo.
También se le hizo el hisopado correspondiente a su pareja, Jésica Cirio, que también lanzó un resultado negativo. “Martín está bien porque tiene la contención de toda su familia constantemente y de su equipo de médicos que están haciendo el seguimiento de él. Quiero agradecer a toda la gente por el apoyo a través de los mensajes hermosos”, afirmó Cirio en declaraciones a Telefé.
El intendente se encuentra internado desde el viernes pasado en el Hospital Lavallol. Según expresó, tuvo dificultades para dormir e indicó que tuvo mucha fiebre, que solo desciende cuando toma un remedio y fuerte dolor muscular.
Además, reveló que perdió el sentido del gusto y que el olfato ya lo tenía muy disminuido a causa del tratamiento de quimioterapia al que se tuvo que someter hace algunos años.
“Arrancó el miércoles después de un almuerzo de trabajo. Ahí sentí calor y me tomé la temperatura inmediatamente porque en la puerta de la oficina tenemos un termómetro para controlar a todos”, recordó Insaurralde, en relación a los síntomas.
En ese sentido, afirmó que no encuentra “otra explicación al contagio” más que el contacto con algún asintomático. “Hemos tomados todos los recaudos. La reunión del Comité Operativo de Emergencia se hace en un gimnasio, no en una oficina cerrada”, agregó.
Insaurralde forma parte del grupo de riesgo ya que tiene una afección respiratoria y además padece de insuficiencia renal.
Sin embargo, el intendente aseguró que “sabía que no podía quedarse al margen” ya que en su municipio se registraron unos 600 casos positivos.
En ese contexto, se mostró comprensivo con la “angustia” que genera el aislamiento obligatorio pero insistió en la importancia de quedarse en casa. “Hagan el esfuerzo, en estos días podemos entrar en el pico de contagios y el virus está circulando muy fuerte por todo el área metropolitana”. Y agregó: "Que la gente entienda que esto no es joda”.
El intendente deberá permanecer en aislamiento estricto hasta que pase al menos tres días sin fiebre.
Además, el resultado positivo de Insaurralde activó el protocolo sanitario del entorno presidencial ya que Alberto Fernández se encontraba de viaje en la provincia de La Rioja y el ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, era parte de la comitiva y había estado en contacto reciente con el intendente. Pero finalmente Arroyo dio negativo.
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