Con 152 casos confirmados y 5 fallecimientos por coronavirus, Quilmes es uno de los distritos del conurbano bonaerense con mayor cantidad de contagiados. Entre los infectados está el director ejecutivo del Hospital Zonal General de Agudos Dr. Isidoro G. Iriarte, Juan Fragomeno, y el director asociado, Daniel Abarquero.
El viernes pasado, la intendenta Mayra Mendoza recorrió las obras de ampliación del hospital –que aumentarán la capacidad de atención con 40 nuevas camas para internación de casos de COVID– junto con el jefe de Gabinete bonaerense, Carlos Bianco, y el ministro de Salud, Daniel Gollán.
Ni la intendenta ni los funcionarios de Quilmes que la acompañaron estuvieron en contacto estrecho con el director durante la recorrida, pero, por precaución, se decidió hisoparlos a todos. Mendoza continuó con sus actividades pero aislada en su casa.
Este lunes por la tarde, fuentes municipales confirmaron que el resultado del test fue negativo: ni la intendenta ni el resto de los funcionarios quilmeños se encuentran infectados con COVID-19.
Un mes atrás, quien atravesó una situación similar fue el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, quien había estado en contacto con médicos del Hospital Belgrano que contrajeron el virus. Finalmente, se sometió al test y el resultado fue negativo.
Durante la recorrida, la intendenta reiteró el pedido a los quilmeños de mantener el aislamiento social y aseguró que "el hecho de pedirles que se queden en sus casas es una necesidad que tenemos para cuidarnos entre todos y entre todas. Necesitamos que haya responsabilidad individual y colectiva.
Se trata de la colocación de 20 módulos prefabricados donados por la empresa SACDE que totalizan 450 metros cuadrados cubiertos, con las tareas de infraestructura muy avanzadas, tal como informó el Municipio en un comunicado que difundió el viernes.
Mendoza también contó en su recorrida: “Hace dos semanas ya hemos comenzado a tener personas que presentan síntomas sospechosos de coronavirus o son casos confirmados en los centros de aislamiento sanitario, puntualmente en el que armamos en la Universidad Nacional de Quilmes. También hemos armado otro en el Jardín de Infantes Municipal Nº 4 de La Florida. Estamos haciendo uso de esos centros de aislamiento sanitario para aquellas personas que no puedan hacer la recuperación del coronavirus en sus casas y, además, estamos ampliando la infraestructura sanitaria".
Del recorrido también participaron Nicolás Kreplak, viceministro de salud bonaerense, Jonatan Konfino, secretario de Salud del Municipio de Quilmes, y Cecilia Soler, secretaria de Desarrollo Urbano y Obra Pública.
El 30 de abril pasado, murió por COVID-19 el médico cardiólogo Hugo Ramírez, que trabajaba en la clínica quilmeña General Belgrano y prestaba servicios en cinco salas municipales del partido, Los Eucaliptos, La Florida y La Primavera, de Quilmes Oeste, e Itatí y Alicia Franco, en Bernal Oeste. Los centros de salud fueron aislados preventivamente tras conocerse el caso.
El jueves, un día antes de la visita que la intendenta realizó por el Hospital Iriarte, se trasladó a las instalaciones de la empresa francesa DeltaPlus, donde acompañó al presidente Alberto Fernández a conocer la producción de barbijos N95, la única fábrica en América Latina que confecciona ese tipo de protección, la máxima disponible para evitar el contagio de COVID-19.
Quilmes es la quinta ciudad más poblada de la provincia de Buenos Aires, con 580.000 habitantes, y tiene un 20% de población calificada como vulnerable, con deficitario acceso a los servicios públicos como cloacas, agua, luz, transporte, y lo que se define como “trama urbana irregular”, con viviendas construidas con materiales precarios, alta densidad poblacional y escaso o nulo espacio verde.
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