Cayó una organización que usaba una ambulancia para transportar y vender 300 pantuflas en medio de la cuarentena

Está claro que la cuarentena obligatoria decretada por el gobierno nacional para contrarrestar el avance del coronavirus en el país paralizó prácticamente toda la economía. Son muy pocos los negocios que pudieron mantener cierta actividad y por eso algunos -que no están habilitados- tratan de ingeniarse métodos sorprendentes con tal de burlar la medida.

Uno de esos caso tuvo lugar en el barrio porteño de Once, donde efectivos de la policía de la Ciudad y de la Agencia Gubernamental de Control (AGC), detuvieron a 12 personas acusadas de usar una ambulancia para transportar y vender pantuflas en medio del aislamiento. Un producto que obviamente no está incluido en el listado de mercaderías de primera necesidad.

Según detallaron fuentes policiales, el insólito método para esquivar la cuarentena comenzó a descubrirse cuando efectivos de la División Sumarios y Brigadas de Prevención de la Comisaría Comunal 3 observaron días atrás a un grupo de varias personas mientras cargaban mercadería en una ambulancia y en una camioneta marca Chery Tiggo, mientras que otro hacía de “campana” vestido con indumentaria hospitalaria. Parecía un enfermero.

Ante esta situación, los efectivos los demoraron para identificarlos y corroboraron que eran los dueños de un comercio ubicado en la calle Sarmiento al 2800 y que estaban sacando 300 pares de pantuflas de ese local para cargarlas a bordo de la ambulancia y de una camioneta que tenía autorización para transitar como transporte de alimentos.

Por orden del Juzgado Criminal y Correccional Federal Número 12 y la Secretaría Número 23, se dispuso la detención de las doce personas, todas mayores de edad y de nacionalidad argentina, venezolana y peruana, así como el secuestro de las pantuflas encontradas y de los vehículos. Además, personal del a AGC, realizó la clausura del local. Entre las personas detenidas estaba el ambulanciero.

En la ciudad de Buenos Aires se han dispuesto 131 controles, entre los ubicados en los puntos de acceso y los controles móviles que circulan por calles y avenidas.

Desde el viernes 20 de marzo en que comenzó la cuarentena obligatoria, 10.068 personas fueron demoradas, notificadas o trasladadas a su domicilio y 763 fueron detenidas por romper el decreto de alcance nacional. Lo que hace un total de 10.381 infracciones.

Además, desde esa fecha fueron secuestrados 209 vehículos por violar la cuarentena.

El teléfono 147 recibió, desde el lunes 16 de marzo, 16.338 llamadas con denuncias de casos de violación de cuarentena.

Por la falta de uso de cubrebocas en comercios y medios de transporte, ese mismo número recibió 156 denuncias desde el 15 de abril.

Desde esa fecha, la Agencia Gubernamental de Control hizo 320 inspecciones, que derivaron en la aplicación de 40 multas por distintas infracciones a la cuarentena.

Otra caso de una ambulancia como pantalla para el delito en medio del aislamiento

El jueves pasado, la policía de Chaco arrestó a un grupo de tres enfermeros que transportaban cocaína dentro de una ambulancia que viajaba desde Resistencia a la ciudad de San Martín.

El personal médico fue detenido en medio de la ruta, después de que los policías hallaran la droga en la conservadora de sangre dentro de unas cajas de medicamentos para niños. Los tres quedaron detenidos mientras el Ministerio de Salud provincial inició un sumario administrativo y los separó de sus funciones.

De acuerdo con la información brindada por fuentes policiales, los tres enfermeros trabajan en el Hospital Anselmo Pértile de la localidad de General San Martín y del jueves salieron hasta Resistencia, que queda a 234 kilómetros, para trasladar a un paciente que debía ser internado en el Hospital Perrando. Luego de dejar al hombre en el centro médico, el personal médico inició su regreso hacia su ciudad.

A partir del dato de que podrían estar transportando droga, se reforzaron los controles sobre la Ruta Provincial 90 hasta que a la altura del cementerio de esa ciudad, a pocos kilómetros del ingreso, los policía plantaron el último puesto de control. Así, dieron con la ambulancia interno 6674 en la cual viajaban dos enfermeras y el conductor del vehículo.

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