Al igual que lo ocurrido en provincias como Catamarca, La Rioja y Jujuy, la Municipalidad de Ushuaia también decretó el uso obligatorio de barbijos comunitarios a toda persona que circule en la vía pública. La medida, que comenzará a regir desde el próximo lunes 14 de abril, convierte a la ciudad fueguina en el primer lugar donde hay circulación local del coronavirus que reglamenta el uso de tapabocas.
La normativa fue resuelta a través de un decreto firmado por el Intendente Walter Vuoto y alcanza a quienes circulen a pie, en vehículos particulares, en transporte público de pasajeros, en los transportes que distribuyen bebidas y comestibles, y todos los que continúan trabajando durante la cuarentena.
Según informaron las autoridades locales, la medida se adoptó para “profundizar las acciones preventivas contra el COVID-19” y evitar la propagación del virus en la ciudad fueguina, ya que “hay evidencia de que las máscaras pueden reducir la propagación de este virus así como de otras enfermedades similares”.
En ese sentido, señalaron que las personas infectadas con la enfermedad pueden contagiar el virus incluso antes de presentar síntomas, con lo cual “el uso de máscaras para toda la población podría ser una medida necesaria”. De esta manera, las autoridades de Ushuaia crearon una campaña masiva para que los vecinos y vecinas confeccionen sus barbijos en casa.
“El uso de máscaras de tela caseras, sumado al distanciamiento social y el lavado frecuente de manos, reduce el riesgo de transmisión del virus. Las máscaras, incluidas las máscaras de tela y las quirúrgicas, tienen una eficacia medible para prevenir que las personas infectadas transmitan el virus a otros, y lo dispersen por las superficies”, señalaron.
De acuerdo con la Municipalidad, la máscara atrapa partículas de virus en el interior, evitando que el virus se transporte al aire. Si bien aclaran que no funcionan de manera completamente eficaz, podrían colaborar para que la carga viral que se propague sea menor.
Otro de los beneficios es que limita el contacto mano a cara. Según explicaron, “la máscara pone una barrera física entre las manos potencialmente contaminadas y los conductos a los pulmones”. En ese sentido, resaltaron que con una máscara disminuye el riesgo tocarse la nariz y boca con las manos, reduciendo el riesgo de infección. Así, “sumar el uso de máscaras al lavado frecuente de manos puede disminuir las probabilidades de contagio”, informaron.
La epidemióloga de la Municipalidad, Adriana Basombrío, indicó a medios locales que la normativa obedece a que "la Argentina está en una fase de mitigación de la pandemia, ya pasó la contención, y con esta medida estamos buscando el bien de la comunidad, mitigando el impacto del virus, sobretodo en las personas más grandes y que tienen mayor riesgo”.
La médica señaló que “es importante saber que el decreto establece la obligatoriedad de la mascarilla o barbijo de uso comunitario y no barbijo para uso de médicos y personal sanitario; porque si salimos corriendo a buscar barbijos que tiene que usar el personal sanitario, reducimos el stock para el personal médico y de enfermeros, que realmente están expuestos al virus”.
"Para la fabricación casera de las mascarillas, la tela de algodón es lo mejor, se pueden fabricar con una remera de algodón por ejemplo, porque se adhiere mejor a la forma de la cara y por lo tanto tiene mejor ajuste. En todo el mundo y en otras provincias y municipios del país que ya han aplicado la medida, señalan que se puede usar gasa, muselina, repasadores, funda de almohada (usar doble en este caso). La banda se puede atar o bien, que es lo mejor, poner unas banditas para que se sujete mejor a la cara”, dijo al diario U24.
Seguí leyendo