Alberto Fernández decidió convocar esta mañana al jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta. El objetivo de la reunión fue “seguir trabajando en la misma línea, buscando reducir la posibilidad de contagios y sin engancharse con los que quieren generar inquietud en la población en medio de esta situación que ya de por sí es dramática”. “No hay que agregarle drama al drama”, explicaron a Infobae.
En esta línea, durante el día de hoy el jefe de Estado tendrá una reunión con las autoridades de la Universidad de Buenos Aires (UBA), el claustro universitario más prestigioso de la Argentina, que se ofrecieron colaborar para frenar la pandemia con contenidos educativos digitales.
También figura en la agenda una cita con la UIA, cuyo presidente, Miguel Angel Acevedo, fue convocado ayer por el ceremonial de Fernández. El Presidente quiere validar con empresarios y sindicalistas la extensión del distanciamiento social, preventivo y obligatorio que anunció el domingo, pero ante la suma de demandas de uno y otro sector, que nadie de su equipo pudo ordenar -tampoco- con las distintas visiones dentro del Gobierno acerca de cómo encarar los paliativos contra la recesión.
En el transcurso del día podrían sumarse otros empresarios al encuentro que no tendría el objetivo de realizar ningún anuncio sino que Fernández llegara a comprender el dilema en el que se encuentran las empresas que, más allá de sus tamaños, se encuentran ante situaciones similares que empiezan con problemas acuciantes en la cadena de pago y terminan con la imposibilidad de hacerse cargo de sus obligaciones impositivas.
Claramente, el tema de cómo encarar las medidas precisas que necesita el empresariado es el que genera mayor controversia dentro y fuera del Gobierno.
Mientras tanto, varios intendentes del conurbano bonaerense fueron contactados para realizar una videoconferencia que se realizaría por la tarde, para analizar cómo están abordando la situación sanitaria, si están recibiendo los insumos que necesitan los médicos, enfermeros y camilleros para atender a los futuros pacientes con COVID-19 y también cómo harán para abordar el problema que le genera la caída de la recaudación impositiva.
“Hay que apurarse”, le transmitió un jefe comunal a un funcionario clave del Presidente. “De esa va a costar muchísimo volver, es muy peligroso”, fue lo que le dijo otro a ese mismo secretario de Estado. ¿Qué hacer? Aún el Gobierno no lo tiene decidido.
Seguí leyendo: