En medio de la pandemia por coronavirus y ante el decreto de cuarentena total dispuesto por el presidente Alberto Fernández hasta el 31 de marzo, la consiga “quedate en tu casa” se volvió muy difícil de cumplir para aquellas personas que viven en situación de calle y ni siquiera pueden poner en práctica las medidas básicas de higiene para no contraer la enfermedad.
Si bien ya eran considerados “grupo de riesgo” antes de la llegada del virus a la Argentina, ahora la situación de estas personas se volvió mucho más delicada porque la contención que recibían por parte de iglesias, comedores comunitarios, ONGs o particulares se vio drásticamente reducida a raíz de las prohibiciones anunciadas.
Según el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires hay 1.146 personas que viven a la intemperie, sobre un cartón tirado en la vereda, en los halls de entrada de los bancos, debajo de los puentes de las avenidas, en los bancos de las plazos o en las estaciones de subte.
Pero las estadísticas no oficiales son más alarmantes: la cifra se eleva a 7.251 de acuerdo a un relevamiento realizado por un grupo de organizaciones políticas y sociales.
Según la información recopilada por la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ), el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), el Centro de Estudios Metropolitanos (CEM), Hábitat para la Humanidad – Argentina, La Boca Resiste y Propone y el Ministerio Público de la Defensa de la Ciudad de Buenos Aires, de ese total, unas 5412 viven a la intemperie, 870 son niños y 1600 están por primera vez en la calle.
Entre las recientes medidas que tomó el Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat para proteger a estos grupos de extrema vulnerabilidad, se encuentran el acondicionamiento de tres polideportivos para tener más plazas disponibles ante el aislamiento obligatorio, la ampliación del horario de atención y apertura de los centros para recibir a estas personas, y la capacitación del personal del programa Buenos Aires Presente (línea de atención social 108) y de los centros para que ante cualquier síntoma deriven a los enfermos en forma inmediata.
Además, se les hizo entrega de termómetros láser -como los que se usan en los aeropuertos - para que puedan tomarles la temperatura a los adultos mayores.
Desde este viernes, los polideportivos a disposición de las personas en situación de calle son Parque Chacabuco (Comuna 7), Pereira (Comuna 4) y Avellaneda (Comuna 9). Entre los tres representarán 250 plazas adicionales y el de Parque Chacabuco funcionará como albergue familiar.
Desde la oposición criticaron que les hagan llenar una declaración jurada a esas personas como único requisito para acceder a esos lugares de contención, dado que queda a su propio criterio y consideración cuál es su estado de salud y no de un médico.
“El formulario incluye preguntas vinculadas con viajes recientes a países afectados, y el domicilio. Este tipo de consultas están muy alejadas de la situación real de las personas que viven en la calle”, denunció el CELS junto a otras organizaciones.
Y continúa: “Las indicaciones recomiendan a esos establecimientos evitar encuentros de las personas alojadas y adoptar medidas de higiene preventivas. Sin dudas, una recomendación de carácter general resulta insuficiente en este contexto”.
Frente a esta delicada situación, legisladores del Frente de Todos presentaron un proyecto para que se declare la emergencia socio-asistencial para personas en situación de calle.
“Son una población que, por sus condiciones de vida, conforman en sí mismas un grupo de riesgo. Muchas son de avanzada edad y tienen problemas de salud preexistentes”, dijo la diputada porteña Laura Velazco, una de las creadores de la iniciativa en su cuenta de Twitter.
Entre los principales puntos figuran: puesta en marcha del operativo anti frío, aumento del 100% del subsidio habitacional, suspensión de desalojos, emergencia por un plazo de un año a los servicios socio-asistenciales, paradores y clubes con servicios médicos y utilización de inmuebles ociosos.
La legisladora pidió que “el Estado acompañe a quienes quedaron excluidos” e invitó a la sociedad a que “refuerce los lazos solidarios” con los más necesitados.
A nivel nacional, el ministerio de Desarrollo Social anunció que, en coordinación con la Ciudad y las provincias, buscará habilitar nuevos paradores para que más personas en situación de calle puedan cumplir con las medidas de prevención.
Seguí leyendo