Real Cartagena quiere el ascenso a Liga BetPlay como sea: estos serían dos de los resultados de su demanda con el TAS

Pese a que el Torneo BetPlay 2024 finalizó con los ascensos de Llaneros y Unión Magdalena, tomando los lugares de los descendidos Patriotas y Jaguares, se mantiene la polémica por el formato que benefició a los dos equipos en la final del certamen en Villavicencio.

Es por eso que Real Cartagena comenzó su proceso de demanda ante el TAS, con el objetivo de ser beneficiado con el repechaje que, según el club, la Dimayor le había prometido en un momento, pero en la asamblea extraordinaria del 9 de diciembre se aclaró que solamente era posible si el rival no era el primero de la reclasificación.

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Cabe recordar que, Llaneros ascendió por ser el mejor equipo en la tabla anual de 2024, tras ganar el encuentro de vuelta en la final por 1-0, marcador con el que igualó ante Unión Magdalena y los samarios ganaron el segundo cupo en la serie por 4-2, además de ser campeones de la temporada.

Julio García es un abogado peruano que se dio a conocer a nivel mundial por salvar a Alianza Lima de la pérdida de categoría y a Paolo Guerrero de una suspensión por dopaje, todo gracias a su gestión y movimientos en el TAS para ganar los casos.

El abogado mencionó que comenzó el proceso de Real Cartagena para asegurar el repechaje del ascenso: “El lunes hemos dado el primer paso para apelar una decisión con la que uno no está de acuerdo. Ese primer paso se llama ‘presentación de una declaración de apelación’. La declaración de apelación es un recurso en el que uno le dice al TAS, básicamente, hay una decisión tomada por un órgano deportivo, en este caso por la Dimayor”.

“La decisión consiste en una interpretación que el Real Cartagena considera no adecuada al derecho, es decir, ilegal, incorrecta, equivocada, del parágrafo cuarto del artículo 26 del reglamento del torneo. Se pide que se inicie el proceso de apelación. Eso es básicamente lo que se ha hecho”, añadió en entrevista con El Heraldo.

García explicó que se espera que el fallo del TAS se dé antes de que arranque la Liga BetPlay de 2025, pero depende “de la colaboración de las partes o del entendimiento del TAS de lo que hay que hacer, pero la idea es que podamos tener un fallo antes del inicio del torneo del año 2025″.

Sumado a eso, el abogado mencionó que hay dos resultados en el fallo del TAS, señalando que primero se pide la interpretación correcta del reglamento de ascenso, para que la Dimayor corrija: “Son cosas que en su momento se tienen que discutir, hay soluciones diversas en situaciones similares en otros lugares, en algunos casos se ha dispuesto que se agregue un equipo más, en algún caso se ha compensado el daño económico, vamos a ver”.

El abogado peruano explicó al medio barranquillero que la Dimayor cometió un error en la explicación sobre el reglamento de ascenso: “Señaló que ‘’esta es mi interpretación, estos son los escenarios posibles, y listo’. Y así se jugaron (las finales), bajo esa regla, bajo esa interpretación. En la apelación lo que estamos diciendo es: ‘no estoy conforme con la interpretación ni con los argumentos que se dieron’. Hemos juntado los documentos históricos, el acta en la que se aprobó esta modificación (del repechaje) por unanimidad, y alguna otra documentación”.

“Lo que le decimos al TAS es: ‘mire cómo terminó esto ocurriendo, que se jugaron dos partidos, el primero con un resultado (1-0 a favor de Unión) y el segundo que ha tenido el único resultado posible que impedía que ocurriese el repechaje (1-0 a favor de Llaneros), en un partido en el que se pone en duda la deportividad. Todo eso se ha puesto en conocimiento”, afirmó.

Julio García finalizó al decir que hay un plazo de 10 días para presentar todos los documentos pertinentes, entre ellos “una memoria de apelación, y después de eso la parte contraria tendrá un plazo para poder presentar su contestación. Después de eso probablemente haya una audiencia que podría ser presencial o virtual, y se emitirá el fallo, a veces todo este proceso puede durar 45 días, 40 días si se trata de un asunto realmente urgente. A veces los procesos duran mucho más, dos meses o tres”.