Atlético Bucaramanga inició una nueva polémica en el fútbol colombiano, producto de lo que pasó con Rafael Dudamel y Fabián Sambueza, sancionados por Dimayor debido a sus críticas contra el arbitraje y que les costaron ser apartados por lo que queda de la Liga BetPlay.
Por esa razón, los jugadores protestaron previo al encuentro frente a Fortaleza en el estadio Américo Montanini, donde los aficionados también mostraron pancartas en contra de la División Mayor y el uso del VAR, al que también le llovieron comentarios fuertes.
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Cabe recordar que, en horas de la tarde, el Bucaramanga se pronunció por la sanción de Dimayor y mencionó que apelará la decisión, también señalando que se estaría violando el derecho a la libre expresión y la calificó como desmedida, debido a que tanto entrenador como jugador no volverán a jugar hasta 2025.
La protesta del Bucaramanga
Una gran molestia generó la decisión de Dimayor el viernes 8 de noviembre, cuando sancionó a Rafael Dudamel y Fabián Sambueza por hablar mal del árbitro Wilmar Montaño, que anuló un gol al último minuto de Andrés Ponce y que significó la eliminación en la Liga BetPlay.
Previo al compromiso ante Fortaleza, los jugadores en los actos protocolarios decidieron taparse la boca y el escudo con cinta, haciendo alusión a que Dimayor los “calló” por sus críticas, un hecho que llamó la atención de los aficionados y en la transmisión de televisión.
Dicho acto continuó no solo en la salida al campo de juego, sino en los himnos, el saludo al cuerpo arbitral de Wilmar Roldán y rivales, y en la foto principal, ya en el partido se quitaron la cinta, pero quedó en la retina de los presentes la protesta.
Sumado a eso, en las tribunas se presentaron pancartas con las frases “nos robaron a punta de pito”, “Séptimo mandamiento, no ro-var” y “Mafiayor”, aunque con la aclaración de que solo se vio en las zonas de occidental, debido a que no se habilitaron las graderías oriental y sur baja.
Respuesta a Dimayor
Atlético Bucaramanga decidió apelar las sanciones impuestas por la Dimayor a su entrenador, Rafael Dudamel, y al jugador Fabián Sambueza, tras sus críticas a los árbitros en el partido contra Boyacá Chicó. Según un comunicado del club, son consideradas “desproporcionadas e injustas”, y que tomarán las medidas necesarias para presentar una apelación formal.
El entrenador venezolano, Rafael Dudamel, enfrenta una suspensión de mes y medio que le impide dirigir o participar en actividades relacionadas con el fútbol. Por su parte, el volante argentino Fabián Sambueza fue suspendido de cinco partidos.
El comunicado del Atlético Bucaramanga enfatiza que el club siempre ha competido de manera leal y respetuosa, guiado por principios de integridad y deportividad. Además, subraya la importancia del derecho a la libre expresión, argumentando que el fútbol debe ser un espacio donde el diálogo y la expresión libre puedan coexistir sin temor a represalias.
“Consideramos que el fútbol debe ser un espacio donde el diálogo y la expresión libre puedan coexistir sin temor a represalias ni sanciones desmedidas”, decía uno de los apartados del documento publicado el sábado 9 de noviembre
El club también destacó que estas sanciones no solo afectan a los profesionales involucrados, sino que también tienen un impacto en el club, su afición y la comunidad de Bucaramanga, que sigue acompañando al equipo en cada partido de la temporada, como se demostró en el título de junio: “Seguiremos informando sobre el avance de este proceso y reiteramos nuestro compromiso de defender los intereses de nuestro club y de cada miembro de la institución”.