El deporte colombiano ha encontrado la relevancia que no tenía hace unos años. En la actualidad es normal hablar de representantes como David Alonso, Luis Díaz, Rigoberto Urán u otros exponentes que ponen en alto la bandera de Colombia; sin embargo, esto no siempre fue así.
Es por ello que cada año es importante recordar lo relevante que fue la noche del 28 de octubre de 1972 para el deporte colombiano, puesto que en esa fecha se coronó como campeón mundial Antonio Cervantes Reyes, más conocido como “Kid Pambelé”.
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Antes de la pelea, la participación de Cervantes en la estelar del evento de la Asociación Mundial de Boxeo ya era un acontecimiento histórico y aunque estaba abajo en las apuestas, el oriundo de San Basilio Del Palenque sorprendió al noquear en el décimo asalto a Alfonso Peppermint Frazer en Panamá, lo que lo convirtió en el rey de la categoría welter junior.
“Como no recordar aquella noche, yo levante a trompa a Peppermint Frazer, no me vio una, fue un título ganado a puño limpio. Yo hice historia, soy el primer campeón mundial que tuvo Colombia”, declaró “Kid Pambelé” a El Universal sobre esa noche.
Sin que fuera su prioridad, el boxeo hizo que Cervantes dejara de limpiar zapatos y vender pescado para que tuviera que encabezar las principales carteleras a nivel mundial durante varios años, lo que le sirvió para acumular dinero y ayudar a su pueblo, en donde se encargó de poner el primer alumbrado público.
A nivel de logros, “Kid Pambelé” mantuvo el título mundial durante varios años, cada una de sus peleas se convertía en un motivo para detener al país y de esa forma se estableció como la primera leyenda del deporte colombiano, pero también como el primer ejemplo de cómo la fama puede colapsar a un individuo.
Así está “Kid Pambelé” en la actualidad
Cervantes se gastó gran parte de su fortuna cuando cayó en la drogadicción, esto lo alejó por completo de los medios y del deporte. A pesar de que en San Basilio Del Palenque hay un gimnasio con su nombre, “Kid Pambelé” se radicó en una vivienda que compró en sus inicios junto a su esposa, que es la única persona que se quedó junto a él a pesar de las dificultades.
Durante un especial que realizó Testigo Directo sobre la vida del exboxeador, las personas en Palenque afirmaron que seguían viendo a Cervantes como un ídolo y aunque recordaron los escándalos que ha protagonizado, mencionaron que en la actualidad se ha convertido en una persona más tranquila.
“No quiero recordar eso ya”, afirmó el exboxeador al ser cuestionado sobre sus años de gloria en el deporte; de la misma forma, con pocas palabras respondió las preguntas que tenía el periodista, hasta que tras varios minutos concluyó la charla diciendo “Ya tomaron las fotos, ya está” e ingresó a su vivienda de nuevo.
En una de las pocas respuestas, Pambelé afirmó que no tiene sueños o aspiraciones, que lo único que desea es permanecer “tranquilo aquí en la casa”.
El especial que tenía como objetivo charlar con el campeón de boxeo terminó siendo un diálogo con Carlina Soto, su esposa, que reveló que la vida junto a Cervantes no es fácil, principalmente porque prefiere no tener contacto con las personas y con esto evitar tener tentaciones de recaer en su problema.
“A veces, como que no quiere sentarse así en reuniones, no quiere hablar, pero bueno, a pesar de todo no es fácil, porque eso es una batalla que hay para que se sostenga”, afirmó Soto.
De la misma forma, reveló que el excampeón protagonizó un hecho de violencia la última vez que salió de su vivienda, que estuvo en un programa de rehabilitación en Cuba y que actualmente vive humildemente, a diferencia de los lujos que tuvo en su auge deportivo.
“Él ahora no está consumiendo, pero hay que tenerlo así, bajo medicamentos, luchando con él y pidiéndole a Dios que tenga misericordia y lo sostenga con su mano poderosa, porque esto no es fácil. Gracias al Señor, a pesar de su vida desordenada, lo veo bien, aunque no haya plata, está bien”, puntualizó la esposa de “Kid Pambelé”.