En el estadio Nemesio Camacho El Campín de Bogotá se disputó el partido de ida de los octavos de final de la Copa Betplay, también conocida como Copa Colombia, entre Millonarios y Bucaramanga.
La expectativa era alta por un enfrentamiento que prometía intensidad entre dos equipos de buen manejo técnico, pero el resultado fue un empate sin goles que careció de emociones, y que dejó a la afición con un sabor amargo tras un juego sin el poder ofensivo esperado.
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Ahora Millonarios deberá viajar al estadio departamental Américo José Montanini, en la capital santandereana, con la misión de vencer al equipo dirigido por Rafael Dudamel.
Por su parte, Bucaramanga buscará aprovechar la localía para sellar una victoria que le permita avanzar de ronda y aspirar al anhelado doblete de Liga y Copa Betplay este año.
El juego que estuvo marcado por la fricción y poca generación ofensiva no pasó desapercibido en redes sociales, precisamente los usuarios de Instagram, X y Facebook, compartieron diversos memes y burlas sobre lo evidenciado en El Campín.
Varias de las burlas en redes sociales se centraron en lo aburrido que resultó el partido y la evidente falta de propuesta ofensiva por parte de Millonarios.
Los hinchas no ocultaron su decepción, señalando la falta de creatividad y la poca ambición del equipo bogotano, que a pesar de ser local no logró generar peligro significativo.
Los memes y comentarios irónicos hicieron eco de un encuentro que terminó dejando más bostezos que emociones, algo que los seguidores azules no esperaban de un equipo que usualmente se muestra dominante en El Campín.
El cuadro Embajador tendrá que arreglar el panorama para el siguiente partido que es el próximo viernes 4 de octubre, por lo que los dirigidos por Gamero solo tendrán un poco más de 48 horas para recuperarse física y emocionalmente de lo ocurrido ante el Bucaramanga.
“Yo nunca voy a estar en contra de lo que la hinchada haga, ellos tienen todo el deber, nosotros tenemos que ganarnos eso con el resultado. Esto es de nosotros de darle la confianza a ellos, y cómo se gana eso, con trabajo, ganando. Estamos peleando esta Liga, este torneo (Copa Betplay), es normal, esto pasa en todas partes, pero tenemos que tener la cabeza tranquila y procuraremos darles triunfos”, indicó Alberto Gamero tras la rueda de prensa del partido.
El partido será contra el Deportivo Cali, en el estadio del equipo vallecaucano, correspondiente a la jornada 13 de la Liga BetPlay. En este certamen, Millonarios viene de una contundente goleada 3-0 sobre Envigado, en un encuentro disputado el sábado 28 de septiembre, en el que Mackalister Silva y Leonardo Castro estuvieron presentes en el campo. Sin embargo, ante Bucaramanga, Gamero optó por una nómina alterna que no logró el resultado esperado.
El aburridor empate entre Embajadores y Leopardos
El empate sin goles entre Millonarios y Atlético Bucaramanga dejó mucho que desear, evidenciando la falta de claridad ofensiva y de ambición de ambos equipos. Desde el inicio, el partido mostró un ritmo lento, con pocas opciones claras para romper el marcador. Bucaramanga intentó sorprender a través de Fabián Sambueza y una buena acción colectiva de Aldair Gutiérrez, pero el balón siempre se fue desviado o fue detenido sin mayores problemas por Álvaro Montero.
En la segunda mitad, el partido no mejoró, y aunque Millonarios intentó con variantes como el ingreso de David Mackalister Silva y Leonardo Castro, el equipo bogotano no logró generar ocasiones claras. De hecho, la oportunidad más clara llegó al minuto 81, cuando Leonardo Castro, tras un buen pase, envió su remate por encima del arco, frustrando a la afición local que esperaba el tan ansiado gol.
La fricción en el mediocampo y la falta de ideas en ambos bandos hicieron que el encuentro se convirtiera en un monólogo sin intensidad, con Millonarios viéndose sin rumbo y Bucaramanga conformándose con el empate. Un partido que, a pesar de la expectativa generada, terminó siendo una presentación decepcionante en el estadio El Campín, donde los hinchas se retiraron con un sabor amargo, tras noventa minutos sin emociones ni goles.