El fútbol colombiano, en el segundo semestre de 2024, pasó por muchos problemas debido a la realización del Mundial Femenino Sub-20 que afectó el calendario de competencias para la primera y segunda división, además de las finales para la Liga Femenina 2024.
Sobre eso, Dimayor reveló las dificultades en cada sede para programar un encuentro profesional, que no solo se debe al certamen de la FIFA, que desde agosto tomó control de los estadios para su preparación, sino por más cuestiones referentes al escenario y la ciudad.
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También se discutió mucho lo de la Liga Femenina, que demoró más de un mes para la definición del título, y se mantiene el debate sobre lo que pasará en su edición 2025, pues muchos sectores piden que sea un torneo con una duración superior a un semestre, algo que, según la División Mayor del Fútbol Colombiano, no es fácil.
Los problemas de programación en el fútbol colombiano
Durante la temporada 2024, una de las quejas más escuchadas entre los aficionados y la prensa para los partidos de la Liga BetPlay es que muchos se programaron de manera continua, sin espacio de descanso entre fechas y provocando todo un desorden de cuándo jugaba determinado equipo.
Fernando Jaramillo, presidente de Dimayor, le dijo al periódico El Tiempo que las razones para programar un juego en la primera o segunda división depende de tres factores, el primero tiene que ver con las condiciones del escenario: “Algunos estadios no cuentan con la iluminación requerida para transmitir en horarios nocturnos”.
El segundo punto tiene que ver con la señal de televisión que cuenta con los derechos exclusivos del fútbol colombiano, que tiene peso en las decisiones para los horarios: “En un acuerdo previo con nuestro canal licenciatario, Win Sports, los partidos deberán ir en un horario exclusivo, evitando la simultaneidad”.
La tercera razón se basa en las reuniones con las autoridades de cada ciudad, para organizar la logística con respecto al ingreso de público, barras bravas, el día y la hora del partido: “En algunas plazas tenemos restricciones en términos de seguridad y prestación de servicios de policía con algunos horarios en específico”.
Jaramillo también explicó la situación de algunos equipos en la Primera B, que también sufren por la realización del Mundial Femenino Sub-20, que “también reserva varios estadios como campos de entrenamiento, que son los escenarios de varios equipos de Torneo BetPlay. De igual manera, clubes de Liga han tenido que utilizar otros estadios en donde se juega Torneo para jugar sus partidos”.
“Por ejemplo, en el Olaya se están jugando los partidos de La Equidad y Fortaleza, pero al mismo tiempo debemos programar a Real Cundinamarca, Bogotá FC y Tigres: todos deben jugar en días diferentes. Y viceversa: en Cali, muchos clubes están utilizando el estadio del Deportivo Cali para jugar; por lo tanto, hay que verificar cuándo juega el club dueño del estadio para programar los partidos de Boca Juniors, Atlético, Internacional y Orsomarso”, añadió.
Situación de la Liga Femenina
El presidente de la Dimayor también respondió al periódico sobre lo que pasó con la final de la Liga Femenina, cuyas finalistas esperaron 35 días para jugar: “Ese fue un compromiso previamente establecido con todos los equipos participantes y teníamos que respetarlo. Se buscó que los clubes pudieran contar con las plantillas completas. El ejemplo más claro es Manuela Pavi, jugadora convocada a la Selección Colombia a los Juegos Olímpicos: regresó y fue la figura de la final con dos goles”.
Sobre la edición 2025, Fernando Jaramillo afirmó que sigue en discusión, pero resaltó los avances en 2024: “Por primera vez, tuvo una duración de seis meses y por primera vez se implementó el sistema de Cuadrangulares Semifinales. Esos logros son parte de la evolución que queremos darle al fútbol femenino año tras año. Además, lo más importante a tener en cuenta en este tipo de campeonatos es alcanzar una sostenibilidad financiera. Estamos en la constante búsqueda de diferentes patrocinadores de entidades públicas y privadas que apuesten a la Liga Femenina de nuestro país”.
“Este año pudimos realizar este campeonato de esta duración, gracias al aporte del Gobierno Nacional, a través del Ministerio del Deporte, y a BetPlay, el patrocinador oficial de todos nuestros campeonatos. También debemos tener en cuenta, para el calendario, las competencias internacionales de todas las categorías de nuestras Selecciones Colombia Femeninas, en donde, a diferencia del masculino, la mayoría de jugadoras sí hacen parte del rentado local. Adicionalmente, debemos tener en cuenta los plazos que la Conmebol requiere para confirmar a las participantes en la Libertadores Femenina, que generalmente es en octubre”, finalizó.