Andrés Escobar, el ‘Caballero del fútbol’: así lo recuerdan sus compañeros 30 años después de su asesinato

Su asesinato, tras la eliminación de Colombia de la Copa Mundial de USA 1994, fue un hecho que marcó al fútbol colombiano y que lamentaron todos los fanáticos del fútbol

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Un autogol de Andrés Escobar en el mundial de Estados Unidos de 1994 le costó la vida - crédito Getty Images.
Un autogol de Andrés Escobar en el mundial de Estados Unidos de 1994 le costó la vida - crédito Getty Images.

Un 2 de julio, pero de 1994, el fútbol mundial se conmocionó al conocerse la triste noticia del asesinato de Andrés Escobar. El Mundial de Estados Unidos 94 dio inicio con una sensación de optimismo para Colombia, después de una destacada campaña de clasificación que incluyó una histórica victoria 5-0 sobre Argentina. Colombia se encontraba en el grupo A junto a Estados Unidos, Rumanía y Suiza.

El 22 de junio de 1994, durante el partido contra Estados Unidos, Escobar marcó un gol en propia puerta, lo que contribuyó a la derrota de Colombia por 2-1 y, eventualmente, a su eliminación del torneo. Diez días después, y al retornar a Medellín, Andrés Escobar fue asesinado a tiros, en una acción atribuida a Humberto Muñoz, el chofer de los hermanos Gallón, ligados al narcotráfico.

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Muñoz fue condenado inicialmente a 43 años de prisión, pero tras varias reducciones de su pena, fue liberado en 2005. Los hermanos Gallón, involucrados también en el crimen, fueron sentenciados a 15 meses, pero tras pagar una fianza, solo pasaron tres meses en prisión.

El legado de Andrés Escobar en los hinchas de Atlético Nacional

El equipo verdolaga, donde el defensor brilló en su época como futbolista, brindó un homenaje a 30 años de su muerte - crédito Atlético Nacional

Andres Escobar siempre estará ligado a Atlético Nacional, pues fue allí en donde tuvo su rendimiento más destacado como futbolista a nivel de clubes. Su nombre está escrito en letras doradas por el título de la Copa Libertadores en 1989 y su legado quedó inmortalizado en un muro en la sede deportiva de Guarné, en donde poco a poco se irá llenando con estrellas de los jugadores más importantes de la historia del Verdolaga.

Para los 30 años de su muerte, el departamento de comunicaciones entrevistó a un hincha que tomó la vocería para transmitir el significado de Andrés Escobar en Atlético Nacional. El agradecimiento de los aficionados y su admiración por el talento que mostraba fueron aquellas cosas que más destacó:

“Me tocó un Nacional icónico, me tocó ver a Andrés, me tocó ver un Nacional que fue campeón de la Copa Libertadores cuando yo era muy chiquito. Cuando te marca una figura tan pequeña como un Andrés Escobar, figuras que se las lleva la vida de una, es fuerte. Por ejemplo, cuando pasó lo de la noticia era tristeza, no solo en la gente que le gustaba el fútbol, sino también a quienes no les gustaba el fútbol. El tipo de personalidad que era Andrés, era un líder, la imagen de él la veías en camisetas de la barra, en banderas y en murales”.

El recuerdo de ‘Chicho’ Serna, excompañero en Nacional y en la selección Colombia

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Serna, excompañero y amigo de Escobar, compartió en Blu Radio sus recuerdos y vivencias sobre aquel fatídico día. Relató que, tras la eliminación de Colombia en el Mundial de Estados Unidos de 1994, Escobar decidió regresar a Colombia en lugar de quedarse para ver el resto del torneo, con el objetivo de afrontar su responsabilidad tras haber anotado el autogol. “Él quería regresar para poner la cara al país”, expresó Serna.

Durante el vuelo de Los Ángeles a Bogotá, Andrés Escobar comentó a Faustino Asprilla sobre la necesidad de cuidarse, una advertencia que tristemente se tornaría profética. Serna explicó que nadie esperaba algo tan trágico y recordó con angustia el momento en que recibió la noticia del asesinato. “Me llamó la madre del difunto Omar Cañas y me dijo: ‘Mira las noticias. Están diciendo que mataron a Andrés Escobar’”, relató Serna.

Serna también mencionó el impacto emocional y de seguridad que este hecho tuvo en su vida, señalado que recibió amenazas que lo llevaron a abandonar la ciudad. “Sentimos que la situación era compleja y tras recibir amenazas, decidimos alejarnos. Fue muy difícil”, afirmó el exjugador de Boca Juniors.

Finalmente, Serna recordó a Escobar como una persona ejemplar, destacando tanto su calidad como futbolista y su carisma personal. “Andrés tenía una clase espectacular y era un líder nato en el campo, pero quienes lo conocimos podemos decir que como ser humano era aún mejor”, concluyó Serna.

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