El Junior de Barranquilla está pasando por uno de los momentos más complicados de su campaña en el primer semestre de 2024, debido a que nunca imaginó que se encontraría tan mal en el ámbito local como internacional, y que todo esto ocurriera en tan poco tiempo.
Siendo una de las mejores nóminas del fútbol colombiano, Junior está al borde del fracaso en Liga BetPlay y Copa Libertadores por cuenta de sus malos resultados en abril, cuando terminaría el mes con un golpe demasiado fuerte en su proyecto deportivo, en caso de sufrir una derrota.
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Cabe recordar que Junior está celebrando su centenario en 2024, por eso, la idea es festejar con una nueva estrella y siendo protagonista en el certamen internacional, que además le servirá para recobrar la inversión en una plantilla que tiene un valor multimillonario en el mercado colombiano.
Un abril funesto para Junior
Comenzando la temporada 2024, las expectativas con el equipo de Barranquilla eran muy altas por los fichajes para figurar en el ámbito local e internacional, como campeones defensores en el fútbol colombiano y pensando en armar una buena fiesta para el centenario de fundación.
Sin embargo, en lo que corrido de abril 2024 las cosas van muy mal en Junior, debido a que solo ganó dos juegos de siete disputados en el mes, empató tres en condición de local y perdió dos, que fueron por la Liga BetPlay, con 10 goles a favor y 11 en contra.
Uno de los puntos delicados en esa “mini crisis” en el conjunto barranquillero es la cantidad de puntos que perdió en el estadio Metropolitano, debido a que se dio con rivales que, en el papel, eran fáciles para vencer como Envigado, Universitario y la Liga de Quito.
En lo que respecta a Libertadores, ese buen inicio en la fase de grupos — con la victoria 3-12 sobre Botafogo en Río de Janeiro, en el que Junior demostró un gran poder ofensivo y orden defensivo—, solo quedó allí porque en los siguientes dos juegos no fue capaz de repetir esa hazaña y cedió ante conjuntos provenientes de la altura.
Al borde de la eliminación en Liga
La situación para Junior puede ponerse muy fea al terminar abril de 2024, debido a que se le viene un partido que puede marcar su camino en la temporada, porque está obligado a ganar para salvar todo el proceso que el técnico Arturo Reyes viene liderando.
El domingo 28 de abril, Junior visitará a Deportivo Cali por la fecha 19 de la Liga BetPlay, con la presión de sumar de a tres puntos o empatar para clasificar a cuadrangulares, debido a que una derrota lo pondría a penar si el Medellín supera a Envigado.
La última vez que el Tiburón se quedó afuera de las semifinales se dio en el primer semestre de 2023, en una de las peores campañas del club en los últimos años y que posteriormente significó la salida de Juan Fernando Quintero por diferencias con el entonces técnico Hernán Darío Gómez.
El “ridículo de Junior”
Durante una charla con el narrador deportivo Eduardo Luis, el presidente de Dimayor, Fernando Jaramillo, criticó la acción de Junior durante el juego frente a Millonarios el 17 de abril, en El Campín de Bogotá, donde protestaron después del primer gol azul por una supuesta falta que no le pitaron.
“Que los jugadores del Junior se pararan en pleno partido me parece una afrenta contra todos: rival, espectadores, demás clubes, contra todo. Es lo más ridículo del mundo. Ahí sí, el señor que hizo eso, tiene un liderazgo negativo”, dijo el directivo.
Jaramillo agregó que “yo tengo que defender el arbitraje. Los árbitros son seres humanos y cometen errores. Los dirigentes que piensan que vetar o no presentarse a jugar por la designación de un árbitro que no gusta, es lo más ridículo que hay y totalmente estúpido”.