“Maté un animal”: la cruda confesión de un hombre que asesinó a su madrastra

El sujeto de 37 años confesó el homicidio de Mileyda Ospina, ocurrido en el barrio París, Medellín

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El hijastro de Mileyda confesó
El hijastro de Mileyda confesó el crimen tras intentar ocultar manchas de sangre - crédito redes sociales

La tranquilidad del barrio París, en Medellín, se vio interrumpida por un hecho de violencia que dejó consternados a sus habitantes. Mileyda Ospina, una mujer de 44 años, fue encontrada sin vida en su hogar tras sufrir un ataque brutal. Según informó TeleMedellín, el principal sospechoso del crimen es su hijastro, un hombre de 37 años que vivía bajo el mismo techo que la víctima. El caso, que ocurrió la noche del domingo 16 de marzo, generó una fuerte conmoción en la comunidad y reavivó el debate sobre la violencia intrafamiliar en Colombia.

De acuerdo con los testimonios recopilados por el medio local, los vecinos no escucharon ruidos ni señales de alarma que pudieran advertirles sobre lo que estaba ocurriendo en la vivienda de Mileyda. Sin embargo, todo cambió cuando los gritos de “¡Mataron a Mileyda!” comenzaron a resonar en el vecindario. Una vecina relató al medio: “Nosotros no escuchamos nada ni sentimos nada. Cuando menos pensamos, ya las personas estaban gritando que la habían matado. Salimos y fuimos a la casa, y ya estaba ahí muerta”.

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El barrio París de Medellín
El barrio París de Medellín fue escenario del violento asesinato de Mileyda Ospina - crédito Irina Dambrauskas / REUTERS

El ataque, que habría comenzado como una discusión, escaló rápidamente hasta convertirse en un acto de violencia extrema. Según las autoridades, la mujer sufrió graves lesiones con un arma blanca que le causaron la muerte en el lugar de los hechos.

La confesión que estremeció al barrio

Tras cometer el crimen, el presunto agresor mostró una actitud que dejó perplejos a los vecinos. De acuerdo con lo detallado por TeleMedellín, el hombre se dirigió a la casa de una vecina y pidió usar el baño. Fue entonces cuando notaron que sus manos estaban manchadas de sangre. Al ser cuestionado sobre lo sucedido, intentó minimizar la situación diciendo: “Maté un animal”. Sin embargo, su comportamiento y la sangre en su ropa despertaron sospechas inmediatas.

Ante la insistencia de los vecinos, el hombre terminó confesando que había asesinado a su madrastra. Alarmados por la revelación, los residentes acudieron a la vivienda de Mileyda, donde encontraron su cuerpo tendido en el suelo. De inmediato, contactaron a las autoridades y a los servicios de emergencia, pero los paramédicos confirmaron que la mujer ya no tenía signos vitales.

Las autoridades recopilaron pruebas contundentes
Las autoridades recopilaron pruebas contundentes en la escena del homicidio - crédito archivo Camila Díaz/Colprensa

Aunque algunos vecinos sabían de los problemas entre Mileyda y su hijastro, nunca imaginaron que la situación pudiera llegar a un desenlace tan trágico. Una vecina expresó al medio local: “Nos dejó muy aterrados porque, a pesar de que ella decía que no la llevaban bien y que tenían problemas, no pensamos que llegara hasta ese punto”.

Las autoridades del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) se hicieron cargo de la escena del crimen, donde recolectaron pruebas que respaldan la versión de los testigos y la confesión del agresor. Según los informes, el cuerpo de Mileyda presentaba signos de una agresión violenta, lo que confirmó la brutalidad del ataque.

Horas después del crimen, las autoridades lograron capturar al presunto responsable, que ahora enfrenta cargos por homicidio agravado. De ser hallado culpable, podría enfrentar una condena severa, acorde con la gravedad del delito. Mientras tanto, la familia de Mileyda solicitó celeridad en el proceso judicial y exige justicia para la víctima.

El presunto agresor enfrenta cargos
El presunto agresor enfrenta cargos por homicidio bajo la justicia colombiana - crédito Colprensa

Llamado a la acción y recursos de ayuda

Ante la gravedad de este tipo de situaciones, las autoridades y organizaciones sociales reiteraron la importancia de denunciar cualquier forma de violencia. En Colombia, las personas cuya vida esté en riesgo pueden comunicarse con la línea de emergencias 123. Además, las mujeres que sean víctimas de violencia psicológica, física, económica o sexual tienen a su disposición la línea nacional 155 y la línea púrpura de la Secretaría de la Mujer de Bogotá, 018000112137. Asimismo, las denuncias pueden realizarse a través de las líneas de la Fiscalía General de la Nación, marcando el 122 desde un teléfono celular o llamando al 601 5702000 en Bogotá.