Golpe al narcotráfico en La Guajira: Policía incauta 635 kilos de cocaína ocultos en un bus

En un operativo de control vial, la Policía Nacional, a través de su Dirección de Tránsito y Transporte, capturó a dos personas e incautó 635 kilos de clorhidrato de cocaína.

El hallazgo se realizó en el kilómetro 36+800 de la vía Distracción - Cuestecitas, en el municipio de Hatonuevo, La Guajira. La droga estaba oculta en un vehículo de transporte público y fue detectada durante un procedimiento de inspección rutinario.

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Según estimaciones, el cargamento tendría un valor aproximado de 19 millones de dólares en el mercado internacional, dependiendo de su pureza y del destino final. Las autoridades señalaron que este decomiso es uno de los más importantes en lo que va del mes en la lucha contra el narcotráfico en el país.

El vehículo implicado, un autobús de una empresa privada, cubría la ruta entre Valledupar y Maicao. Durante la inspección, los agentes identificaron un compartimiento oculto con sistema hidráulico, una modalidad empleada por organizaciones delictivas para el transporte de sustancias ilícitas y evadir los controles de seguridad.

Las dos personas capturadas fueron identificadas como Daiber Dailer Muñoz Peláez, de 32 años, quien conducía el vehículo, y Javier Perdomo Moreno, de 39 años, que se desempeñaba como ayudante.

Ambos quedaron a disposición de la Fiscalía General de la Nación, que adelanta las investigaciones para determinar su grado de responsabilidad en la red de narcotráfico.

La brigadier General Susana Blanco, directora de la Dirección de Tránsito y Transporte de la Policía Nacional, destacó la importancia del operativo en la lucha contra el narcotráfico.

“Este golpe al narcotráfico demuestra el nivel de compromiso y eficiencia de nuestra Policía Nacional en la protección de los ciudadanos y la lucha contra las organizaciones criminales. La incautación de más de 600 kilos de cocaína, que no llegarán a nuestras calles, es un resultado contundente que reafirma nuestro objetivo de desmantelar las redes de tráfico de estupefacientes que afectan la seguridad de nuestro país”, afirmó.

La oficial también señaló que este decomiso hace parte de una estrategia para garantizar la seguridad vial y combatir el tráfico de drogas en las principales carreteras del país.

La Policía Nacional ha intensificado los controles de registro y vigilancia en rutas identificadas como críticas para el transporte de estupefacientes, con el objetivo de impedir que estas sustancias lleguen a los mercados nacionales e internacionales.

En una de las mayores operaciones contra el narcotráfico en lo que va del año, las autoridades de Venezuela anunciaron la incautación de 5.407 kilogramos (5,4 toneladas) de cocaína de alta pureza en el estado Zulia, una región fronteriza con Colombia.

Según informó el ministro de Interior venezolano, Diosdado Cabello, el operativo, denominado “Relámpago”, representa un golpe significativo contra los carteles colombianos, a los que atribuyó la propiedad de la droga confiscada.

Cabello, considerado uno de los principales líderes del oficialismo en Venezuela, calificó la operación como un éxito en la lucha contra el narcotráfico y señaló directamente a los expresidentes colombianos Álvaro Uribe Vélez e Iván Duque, acusándolos de ser “jefes del narcotráfico”.

El operativo no solo resultó en la incautación de la droga, sino en la detención de dos alcaldes vinculados al oficialismo venezolano. Según informó Cabello, los funcionarios detenidos pertenecen a los municipios Almirante Padilla y Miranda, ambos en el estado Zulia.

Cabello también destacó que, como parte de esta acción, se destruyeron pistas clandestinas utilizadas para el tráfico de drogas y un submarino que presuntamente formaba parte de las operaciones de transporte de estupefacientes. Estos hallazgos subrayan la sofisticación de las redes de narcotráfico que operan en la región fronteriza.

Durante su intervención, Cabello insistió en que los problemas relacionados con el narcotráfico en la frontera son consecuencia directa de la situación en Colombia.

“No es culpa del gobierno venezolano lo que pasa del lado colombiano”, afirmó, refiriéndose a la violencia y las actividades ilícitas que afectan la región del Catatumbo, una zona conocida por la presencia de grupos armados y cultivos ilícitos.